ESTAMPA CAUDETANA.
EL NISPERERO SE VISTE DE BLANCO.
Nos tenía mal acostumbrados el NISPERERO que crece, guapo, en el corralón del convento de San José (El Carmen), en esta Real Villa de Caudete.
Y digo que nos tenía mal acostumbrados, porque siempre nos ha ofrecido su floración en torno a la Navidad del Señor. Y la Navidad está a casi dos meses vista.
Y, ahí, lo ves, con sus ramilletes de flores. Se encuentra totalmente tachonado por esos ramalazos blancos que se saca de las ramas nuevas.
De ahí que te diga que el NISPERERO nos tenía mal acostumbrados.
Yo creo que se ha sentido animado por el tiempo que venimos teniendo y se ha dicho:
"Para qué voy a esperar a Navidad. Voy a florecer ya puesto que disfruto de un tiempo en que las temperaturas se han plantado, se han puesto en jarras, se han declarado en huelga y han dicho:" aquí estamos nosotras ¿quién nos manda ir tan deprisa a llenarnos de frío?"
Y el bueno del NISPERERO habrá pensado para sus adentros:
"que nos metemos en marzo y yo tengo que florecer en diciembre".
Y ahí lo tienes, florido.
Me di cuenta ayer por la tarde cuando volví del monasterio de las Madres Carmelitas de clausula de cerrar el Manifiesto durante el cual, Jesús Sacramentado, es adorado por las monjas y por los fieles que las acompañan, desde las 16,00 a las 18,00 horas.
Y, claro, en estos tiempos en que, los políticos, nos han echado para atrás el horario, la oscuridad está haciendo de las suyas, a pasos agigantados, viniendo a ocupar el lugar que deja el sol cuando por su naturaleza le es exigido saltar de este continente viejo al nuevo, al de América, que descubriera Cristóbal Colón para nosotros, sin privar a las gentes de allí,a sus aborígenes, de él, sino todo lo contrario, porque les llevamos Cultura, les llevamos la Fe, les enseñamos a trabajar la tierra, para que obtuvieran pingües beneficios, les dimos una Lengua para que se entendieran todos desde el norte hasta el sur de aquellas tierras descubiertas, sin privarles de la suya propia, es más, en tiempos del V Virrey del Perú, Don Francisco Álvarez de Toledo, (segunda mitad del siglo XVI), que era de mi pueblo de Oropesa, se dotaron de gramática a las lenguas autóctonas, a la Quechua y a la Aymara y se tradujo la Biblia a dichas lenguas y las catequesis se les daba en su propia lengua.
Así que, mientras el sol pone luz y color en aquellas tierras, éstas se disfrazan de
"boca de lobo",
que afirma el dicho.
Y esa fue la razón por la que, a mi vuelta del monasterio de las monjas, me llamara la atención el ver que el NISPERERO se hiciera el interesante salpicándose de mechones blancos.
Me acerqué hasta él y, poniéndole luz al telefonillo, pude sacarle una foto a uno de sus hermosos florones blancos.
Y es él, el florón del NISPERERO el que te lleva hoy mi saludo, mis
¡¡¡BUENOS DÍAS!!!
4.11.2024. Lunes. (C. 2.052)
P. Alfonso Herrera. Carmelita.
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