¡Infraganti!

ESTAMPA CAUDETANA.

¡INFRAGANTI!

Ayer tarde caminábamos el reloj y yo.  Él se dejaba caer hacia las 19:30 y yo lo hacía Avenida de la Virgen de Gracia abajo. 

Y, como siempre, ojo avizor, buscando algo que llamara mi atención, que me sorprendiera,  con el fin de hacerlo ESTAMPA CAUDETANA, vehículo a través del cual yo haga llegar mi saludo mañanero a quien conmigo hace otro tanto o, en su caso, a quien, yendo a la Web de la Asociación Cultural Amigos de la historia Caudetana, tiene  a bien leer mis letricas.

Y la ocasión se presentó poco antes de llegar a la Glorieta de la Cruz. Fue en uno de los tiestos que jalonan la entrada, el más cercano a la escalera que da acceso a uno de sus chalets, precisamente aquel del que obtuve la fotografía de un CELINDO, también llamado JERINGUILLA o, como han dado en bautizarle los botánicos, PHILADENFUS PUDENDIS, y que te llevó mi saludo el pasado día 14 de mayo. 

Toda una familia de ECHINOPSIS se habían dado la mano y, puestos de acuerdo, han florecido al alimón. Y, ante tal explosión de belleza, ¿Quién no se siente atraído, sorprendido?

Pues, eso. Me sentí atraído y muy sorprendido. Y, ni corto ni perezoso, eché mano del telefonillo y, a través de la verja de forja, saqué "fuera del tiesto" a tal conjunto de bellezas antes de que sonara el toque a arrebato y se cerraran sobre sí mismas. Pues, es de sobra conocido que estas flores de ECHINOPSIS muestran su belleza emulando a las modelos que hacen otro tanto al pasearse, vistiendo diseños de trapitos de temporada, a lo largo de la pasarela Cibeles de Madrid.

En esas estaba cuando llegó la hija de los dueños en su flamante PKW (coche) alemán para aparcarlo en casa de sus padres y..., me sorprendió INFRAGANTI "sacando" del jardín a las lindas flores de toda una familia de ECHINOPSIS.

Mira, le dije, me has "pescado INFRAGANTI" haciendo esta foto para emplearla mañana como ESTAMPA CAUDETANA.

Se admiró al verla porque, al parecer, no las había visto abiertas, mostrando la hondura de su belleza, hasta ese momento. Y, ni corta ni perezosa, apagando el motor del mercedes, me flanqueó la puerta para que me diera el gustazo de hacerles la foto desde cerquita,  junto a ellas. 

Y, así lo hice. De modo y manera que hoy te lleva mi saludo ese precioso ramillete de flores de ECHINOPSIS que reinaron, por un día (*), en el jardín del chalet de la madre de la chica que me invitó a pasar para sacarles la foto desde cerquita.

Le dije a ella:"no dejes de decirle a tu madre que abra mañana la Web de "Amigos de la Historia Caudetana" porque desde ella le daré, y a tí, si haces otro tanto", mis

¡¡¡BUENOS DÍAS!!!

3.6.2025. Martes. (C. 2.251)

P. Alfonso Herrera. Carmelita.

(*) La flor de la ECHINOPSIS dura muy poquito. Algunas de ellas se abren cuando se inicia el día, a las 0,00 horas y se cierran a poco de extasiarse el sol al verlas, porque para cuando se juntan las manecillas del reloj en las12,00 horas, ya se han cerrado. Otras hay que duran todo un día completo, pero nunca más, por lo menos aquellas que lo hacen en el claustro barroco-toscano del convento de San José (El Carmen) de esta Villa.