ESTAMPA CAUDETANA.
MES DE JULIO. DÍA 6.
MES DE JULIO. DÍA 6.
Imagen de la Virgen del Carmen en el paseo del puerto de El Campello
- Dijo San Juan Pablo II°
- «Espero que el Santo Escapulario de la Virgen del Carmen sea para todos, especialmente para aquellos que lo visten, ayuda y auxilio en los peligros, sello de paz y signo de auxilio da la Virgen 16.7.2003).
El Papa San Juan Pablo II° nunca ocultó que, antes de entrar en el Seminario de Cracovia, había abrigado la intención y el deseo de entrar en el seminario carmelita de Badowice.
A ese convento iba con alguna frecuencia para confesarse, para hacer ejercicios espirituales y para consultar en su biblioteca las obras y los escritos místicos de San Juan de la Cruz que tan profundamente le impactaron y que le indujeron a profundizar en ellos y, por ello, hizo su tesis doctoral, defendida en el Angelico de Roma, sobre el santo místico carmelita de Fontiveros (Ávila). fue en ese lugar, donde, diría tiempo después, que a la edad de 10 años le fue impuesto el Santo Escapulario de la Virgen del Carmen y que, desde entonces, escribió a los Carmelitas en el 750 aniversario de la entrega del Santo Escapulario a San Simón Stok (2001), «tengo sobre mi corazón la enseña de la Virgen María del Monte Carmelo, su Santo Escapulario».
Sí, se sintió tocado, desde el ámbito de su devoción mariana adquirida en la Parroquia y en el convento carmelita de Wadowice, para entrar en el claustro carmelitano pero, siempre hay un pero, el cardenal Stefan de Cracovia, le encaminó hacia el seminario diocesano y al hacerlo le abrió el camino que le conduciría a Roma donde descansan los restos mortales de un papa que vino de «lontano» y que subió hasta la cumbre de la santidad. Aquel Carlos Wojtyla se convertiría en San Juan Pablo II°.
La Virgen del Carmen, cuyo Santo Escapulario vestía desde pequeñito es, según propia confesión, «toda la fuerza» del Papa Wojtyla.
Ya lo era desde pequeñito y lo era más fuerte, si cabe, cuando, ya Cardenal Wojtyla de Cracovia, tras la celebración del Concilio Ecuménico se procedió a la reforma litúrgica en el año 1969 en la que dejaba de tener importancia en el calendario litúrgico la celebración de la fiesta del Carmen, cada 16 de julio, dejándola en «memoria libre», fue él y un montón de obispos de todas las partes del mundo, quienes escribieron a Roma para que se reconsiderara tal decisión y ¡lo consiguieron! La catalogaron como MEMORIA OBLIGATORIA por lo que se sigue celebrando litúrgicamente en todo el orbe católico.
Ahí te va mi saludo, mis
¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
6.7.2019. Sábado. P. Alfonso Herrera, Orden Carmelitana.
Interesante conocer los detalles precisos sobre la vida de San Juan Pablo II.
ResponderEliminarAlgo conocía pero no con tanta exactitud.
Es una gozada confirmar que grandes personas son devotas de nuestra Madre y Hermana.
Gracias por compartir la historia y animarnos a venerar un poco más cada día a nuestra Señora del Carmen.
Un feliz sábado mariano,Padre.
Muy buenos días, P.Alfonso, que interesante la historia que hoy nos cuenta sobre el Papa San Juan Pablo ll y su devoción a la Virgen del Carmen y el Escapulario, con todo estos relatos usted nos va acercando a conocer más y más esta devoción. Que tenga un feliz día.
ResponderEliminarBuenos días, P. Alfonso,,como ya he dicho en dias anteriores el escapulario de la Virgen del Carmen se conoce por todaz partes y San Pablo ll tammbien le tenia gran devocion como ested dice en el gran comentario de hoy feliz sabado
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