ESTAMPA CAUDETANA.
LA NATURALEZA.
Siendo superior de
nuestra Comunidad de Madrid, entregué al Señor a un miembro de mi Comunidad. Se
trataba del P. Balbino Velasco, Doctor en HISTORIA DE AMÉRICA, con cátedra en
la Universidad Complutense de Madrid. Durante los muchos años que compartimos
Comunidad, no faltaron momentos en los que salía a colación su especialidad. No
ocultaba que en el desarrollo de la conquista de las tierras nuevas hubo abusos
y, a veces, aberraciones pero se deshacía en elogios de la labor llevada a cabo
en aquellas tierras por los españoles, sobre todo cuando la Reina Isabel llamó
la atención de sus representantes en los territorios conquistados y puestos
bajo su corona para que «se anduvieran con cuidadico» en el trato dado a sus súbditos
los aborígenes de las tierras anexionadas. Y, entre tanta información, me
llamaba la atención la defensa de etnias que, a la sazón, estaban siendo
masacradas por imperios emergentes de aquellos lugares. No te voy a aburrir,
pero quiero hacer hincapié en que fruto de aquellas luchas entre ellos, ciertas
culturas precolombinas habían desaparecido y de ellas se han descubierto estupendos
vestigios a lo largo del siglo pasado. Eran tesoros del pasado que se había
«tragado» la selva. No así la obra de los españoles que dejaron y todavía se
contemplan y causan admiración, edificios civiles, militares, religiosos,
universidades, hospitales, ciudades, vías de comunicaciones y... LO MÁS
IMPORTANTE, JUNTO CON LA TRANSMISIÓN DE LA FE CRISTIANA, QUE NO EXTERMINARON
RAZAS NI PUEBLOS INDÍGENAS, NI SUPRIMIERON LAS LENGUAS AUTÓCTONAS, COMO SE
PUEDE VER HOY (alegato más fehaciente contra la famosa «Leyenda Negra,»), cosa
que no hicieron otros países colonizadores que se tienen por adelantados y
respetuosos, como también se puede observar hoy en día (El V° Virrey del Perú,
Don Francisco Álvarez de Toledo, paisano mío, podría decirnos mucho de eso,
aunque cometiera alguna «barrabasada», que todo hay que decirlo, y verlo in
situ y no desde hoy. En su testamento dejaba dotaciones para universidades y
hospitales.). Otro tanto ha ocurrido en la India y países limítrofes. La selva
había sujetado entre la raíces de los grandes árboles monumentos religiosos,
templos, y ciudades enteras. Y es que la fuerza impresa por el CREADOR en la
NATURALEZA es tan grande que la industria humana de aquellas épocas no era otra
cosa que un juego de niños ( hoy el depredador humano, provisto de herramientas
mortíferas, la está infiriendo tan duros ataques que...).
En todo ello pensaba yo estos días de atrás, cuando, al
volver de celebrar la Eucaristía en San Francisco, me topé con esa planta que,
casi frente al n° 12 de la calle Luis Pascual, se levantaba allí donde el
asfalto de la calle formaba ángulo con el pretil de la acera, ya lo ves. Sí, me
introduje con el pensamiento en la intrincada maraña de la selva que fagocitaba
la obra humana y, la planta, toda ella, con un color envidiable, me estaba
gritando ¡PERO QUÉ GRANDE Y FUERTE E
IMPONENTE ES LA NATURALEZA! Cómo es capaz de buscarle las vueltas a la
actuación de los bípedos racionales, que han entrado a saco en su medio,
hiriéndola, para buscarse acomodo.
Cuando la descubrí me desaparecieron las prisas y permanecí
quieto, contemplándola, llenándome de ella y diciendo para mí: «pero
¡QUÉ GRANDE Y FUERTE ES LA NATURALEZA! Algunos, no todos, de
los que pasaban a mi lado, tras saludarme, dirigían su mirada a donde yo tenía
puestos mis ojos.
Aquella planta, hasta ese momento en que yo la sorprendí,
había tenido suerte pues ninguno de los conductores que suelen aparcar a ese
lado de los pares de la calle Alcalde Luis Pascual, no la habían aplastado,
inmisericordes, con las ruedas de sus vehículos.
¡QUÉ FUERZA, QUÉ ENERGÍA, TIENE INMERSA EN SÍ, POR
PROVIDENCIA DE DIOS CREADOR, LA NATURALEZA!
Alabado sea Él por siempre.
Contentico sale a buscarte mi saludo, mis
¡¡¡¡¡¡BUENOS
DÍAS!!!!!!
7.6.2019. VIERNES.… P. Alfonso Herrera, O. Carmelitana
Siempre son sustanciosos tus comentarios....hoy también.generosa reflexión sobre la tremenda fuerza de la vida.
ResponderEliminarEn mi vida he podido comprobar durante cuatro años en Republica Dominicana,el inmenso tesoro de su cultura repleta del Evangelio en una forma festiva ...muy vital.
Son evidentes los trabajos y las vidas que nuestros antepasados españoles dejaron allí.
Lo máximo sus propios genes sin despreciar a las personas.
Esa integración de razas ha dado lugar a una tipología humana de inmensos valores envidiables.
Un precioso día primaveral,Padre.
La plantica una preciosidad...aquí en las losas del jardín no es raro ver asomar una higuera...u otras plantas que reclaman el lugar que era suyo...
ResponderEliminarMuy buenos días,P.Alfonso, hoy nos llena de historia y evangelización, siempre es bueno recordar y aprender. Y la naturaleza si es muy caprichosa , en cualquier sitio nos sorprende y yo por más que las cuido muchas veces no consigo tenerlas como se merecen.Que tenga un buen día.
ResponderEliminarHay que ver como con una pequeña planta que se a hecho hueco para salir en la orilla de una acera nos a llevado usted unos siglos atrás y nos a dado una clase de historia magistral. Que tenga un buen día P. Alfonso
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