ESTAMPA CAUDETANA.
LA CALA.
Fiel a la ley que impera en su naturaleza salió a lucirse y
dar lustre al corralón del convento de San José (El Carmen), allí donde éste
linda con la calle Mercado de la Real Villa de Caudete. En su sencillez y
humildad, es preciosa, ¡mírala y disfruta con ella! Crece bajo un Laurel
y de uno de los dos algarrobos que lo hacen en esa parte del corralón, únicos
árboles de la franja mediterránea que hacen su vida en estos pagos porque al
ser muy sensibles a las temperaturas bajas, huyen de estas zonas de la Mancha
Baja, vigilados ambos por un alto y presumido ciprés que se asoma a la calle
Mercado no porque sea curioso, que puede que lo sea, sino porque esta
clase de pinos buscan la altura como si quisieran meterse en el cielo y desde
todo lo alto de sí mismo contempla allá abajo todo lo que acontece de la vida
del pueblo a través de los lugareños que van y que viene a sus cosas aunque,
últimamente, no tanto porque los que mandan les han dicho que si salen se
arriesgan a dos cosas pésimas, una, que te encuentres con el virus ese que dice
Covid 19 y eso, amigo, es serio, serio, de verdad, Y es que hay que andarse con
mucho cuidadico porque se abraza a ti, de tal manera, que no te deja respirar y
ya sabes lo que dice el refrán tan cargado de razón: “Hay abrazos que matan”,
pues, sí, el abrazo que te pega, te mata si te pesca con unos años de más y,
si, además, coleccionas algunas patologías que has ido acopiando en el
transcurso de los años…, ni te cuento. Y, dos, porque si quien se cruza contigo
es un agente del orden público échate a temblar porque te van a mandar sacar la
cartera pues, a la pobre, te la van a aligerar de peso y volumen porque dicen
que sacan de 600,00 € en adelante y tiene que ser verdad porque el otro día se
lo oí decir, con toda solemnidad, al Sr. Alcalde.
Pues, bien. Yo he ido viendo cómo salía de la tierra que en
esa zona siempre es muy compacta y dura, una tras otra, las hojas de una cala
con las que ha ido alfombrando el entorno, ya lo ves en la fotografía, porque
pareciera que no tienen fuerza para subir un poco. Y lo que más me extrañaba
era contemplar cómo los picos de las seis feroces gallinas no las convertían en
proteínas gallináceas como sí habían hecho con unas parientes que querían
merecer debajo del kaqui en la parte sur del corralón. La marabunta no hubiera
hecho un destrozo semejante. Presumo que se deberá a que la toxicidad de esta
clase de calas supera a la de las parientes y es por ello por lo que las
gallinas ni se le acercan. Pero el colmo de los colmos fue el descubrir su
flor, pues no la había visto florecer en todo el tiempo que llevo en la Real
Villa.
Fue Fr. Juan Manuel el que me avisó:
“Baja a ver la flor que ha aparecido en el corralón debajo
del laurel y del algarrobo, aledaña al olivo. ¡Baja antes de que se la coman
las gallinas!
Y bajé y me llevé el alegrón del día, del DOMINGO DE RAMOS.
Esa clase de plantas, que, por cierto, por más que he
buscado, no he dado con ella entre todas las parientes, que son muchas, son
africanas de zonas desérticas y surgen con fuerza y rapidez cuando comienza la
época de las lluvias y las extensas sabanas africanas se visten, para la fiesta
de la vida, en primavera. Pues eso le ha acontecido a la cala rara del corralón
del convento de San José. Ha vivido enclaustrada en una larga cuaresma y con
las lluvias que han caído muy generosamente en el predio, las han animado, de
tal manera, que han cogido fuerza suficiente como para florecer. Y, sí, nos ha
llamado la atención a los frailes de que así ocurriera.
Y lo más lindo es que ha florecido para ofrecerse al
Señor, su Creador, que, montado en un borriquillo, todavía pollino juguetón,
iba a entrar en olor de multitudes en la Ciudad Santa de Jerusalén,
precisamente en el día del DOMINGO DE RAMOS.
Recibe mi saludo, mis
¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
7.4.2020. Martes Santo.
P. Alfonso Herrera Serrano, Carmelita.
Muy buenos días, P.Alfonso, hoy vemos como la cala del corralón (El Carmen) ha florecido y sale para que le dé el sol, mientras las personas estamos en casa , la naturaleza es muy sabía y usted disfruta y quiere compartir esa alegría , que sus plantas sigan alegrandole.Feliz Martes Santo.🙏🙏🙏🙏
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