ESTAMPA CAUDETANA.
LA CLARIDAD LO LLENÓ TODO
Ayer, tras ser recibido por mi galeno en el centro médico de la Real Villa de
Caudete, el coche se dejó llevar por la suave pendiente de la carretera a
Villena, hasta el Santuario de Nuestra Madre la Virgen de Gracia y del bueno de
San Blas. Quería pasar un rato con ELLOS en la presencia del SANTÍSIMO
SACRAMENTO.
Cuando llegué no había nadie. Después de un buen rato apareció con los
achiperres de fregar, la guardesa del Santuario y, comenzando, por el final,
allí donde se venera a Santa Rita, fue subiendo por la nave lateral hacia la
parte de arriba. El silencio reinante solo se rompía con el siseo suave que
dejaba oír la bayeta al ir, de un lado a otro, sobre las baldosas del suelo.
Mientras tanto, yo contaba con mis dedos el sucederse las Ave Marías que, de
diez en diez, llenaban cada uno de los misterios gloriosos del ROSARIO.
Entró un señor mayor que, al no ser de alta estatura, mostraba, con
generosidad, sus formas externas. En seguida se fue y volví a quedar solo
aunque no del todo porque la encargada del Santuario, Lourdes, seguía allí a lo
suyo. Entró luego otro señor mayor. Se fue hasta el fondo y volvió por el
pasillo central mirando a un lado y a otro y con las mismas se fue.
Cuando llevaba más que mediado el ROSARIO entró Pilar que dirigió sus pasos
hasta el fondo no sé si a visitar a Cristo Crucificado o a Santa Rita. Sonó una
moneda cuando cayó en el cepillo de metal de algún lampadario y luego fue
directa hacia la puerta de la sacristía e introdujo una moneda de euro
(Aviso que tiene colocado la Mayordomía en la puerta lateral del Santuario)
y, al hacerlo, se llenó de luz el camarín envolviendo en ella a la imagen de la
VIRGEN DE GRACIA haciendo resaltar vivamente su rostro y el ato verde
esperanza, en perfecta sintonía con el color del tiempo litúrgico, ya lo ves en
la fotografía que da la entrada a este escrito.
Un poco más tarde se encendieron los focos que sacaron los colores a las pinturas del
retablo.
Pilar, en lugar de depositar veinte céntimos en el lampadario para encender una
vela de luz, llenó de luz el camarín y, al hacerlo, iluminó a la VIRGEN DE
GRACIA Y LA CLARIDAD LO LLENÓ TODO.
Pilar no esperó a que todo quedara iluminado. Simplemente se marchó habiendo
dejado el interior del templo lleno de luz.
Entre tanto, yo, terminé de contar las Ave Marías de los Misterios Gloriosos
del ROSARIO:
1.-Jesús resucita de entre los muertos.
2.-Jesús asciende al cielo.
3.- La venida del Espíritu Santo sobre la Virgen y los Apóstoles.
4.- Asunción de la Virgen al ámbito Trinitario.
5.- La Virgen María coronada Reina y Señora de todo lo creado.
Recibe mi saludo, mis
¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
13.8.2020. Jueves. (C. 987)
P. Alfonso Herrera Serrano, Carmelita.
Muy buenos días, P. Alfonso, en cualquier momento es bueno para la visita a nuestra Madre la Virgen de Gracia , Ella siempre nos espera para atender nuestras necesidades.Que tenga un buen día.
ResponderEliminarSiempre es grato visitar a la Virgen . Ella siempre nos espera y nos acoge y si en ese momento te la iluminan mejor se puede contemplar . Que tenga un buen día P. Alfonso.
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