sábado, 2 de marzo de 2019

La Tijera Japonesa


ESTAMPA CAUDETANA.
LA TIJERA JAPONESA.
 - Es bien sabido que los orientales son unos artistas consumados en el cuidado, respeto y en el empleo de las flores para crear unas ornamentaciones primorosas (yo tengo una buena amiga timorense, de nombre FATIGNA, ya sabes, de aquella isla, de Timor, no muy lejana de Indonesia y que fue portuguesa hasta no hace muchos años, que con un poco de verde y unas flores, no importa cuáles, hace verdaderas obras de arte, sobre todo, cuando se trata de adornar al Santísimo Sacramento del Altar o a su Madre, la Virgen). Pues bien en este campo los japoneses son ¡LA BIMBA! SÍ, en eso del arte de tratar a las plantas y a las flores, en particular. Y como el Japón es una isla, es decir, un montoncico de ellas, enseguida se salen sus artes buscando hábitats más amplios donde establecerse y echar raíces.
- Desde allí nos ha llegado el arte de meterse en las raíces de las plantas, no importa que sean árboles, y les has reducido a la mínima expresión. Es como si les hubieran sustraído la hormona del crecimiento logrando verdaderas maravillas a las que han dado en llamar Bonsáis y con ese nombre se les conoce en el mundo entero. Nosotros, los españoles tuvimos un Presidente del Gobierno de la Nación que tenía verdadera debilidad por esas plantas reducidas de tamaño y la gente que estaba al tanto de su debilidad, le obsequiaban con especímenes a cual más bonito, hermoso, singular, único, espectacular y maravilloso. Este presidente fue Felipe González Márquez que, en su adolescencia vistió de azul aunque, después, con el crecimiento se puso en el ojal de la solapa una insignia-anagrama: un puño cerrado del que sobresalía una rosa. Cuando las papeletas de los españoles le sacaron de la vivienda tan chula porque está reservada a los presidentes del Gobierno y que recibe el nombre del barrio de Madrid donde se encuentra ubicada, "LA MONCLOA", se le presentó un problema de los gordos, por lo menos del talante de alguno de los políticos que tuvo que solventar durante su mandato: ¿DÓNDE IBA A METER, EL POBRE, TANTO Y TAN HERMOSO TROPEL DE BONSÁIS, COMO HABÍA LOGRADO REUNIR EN UNA DOCENA DE AÑOS?
- Es de admirar cómo lo solucionó: los regaló, a su vez, al palacio presidencial . Y, creo que, allí siguen perfectamente cuidados por expertos jardineros.
- Pero no te quería hablar de bonsáis. Quería hablarte de que estos abezados biólogos no sólo se bajan a las raíces, sino que se suben a las copas de los árboles y le meten la tijera de podar o el serrucho a las ramas para hacer lo que estás viendo en las fotos.
-  Si vienes hacia Caudete desde la capital, al llegar a Bonete, te encuentras con decenas de olivos jóvenes a los que han "peinado" a la espera de que sean solicitados  para plantarlos en jardines privados  donde  lucirán... Pobres olivos.
- Puede que haya gente a la que gusten, y, ciertamente, los hay. No tienes más que pasearte por la Avenida de la Virgen, casi llegando a la Glorieta de la Cruz, o por la calle Literato Azorín para contemplar estas actuaciones directas sobre estos nobles árboles que son duros en su leña constituyente que aguantan el paso del tiempo y sus embates, durante milenios, como aquellos que viven en EL HUERTO DE LOS OLIVOS, al pie de la iglesia que llaman de "LAS NACIONES", lugar donde Jesús oró y sudó sangre, según nos comunican los Evangelios (Lc 22,44).
-  A pesar del "luk" que lucen estos olivos viejos, viejos, muy viejos de Caudete a los  que les han quitado su belleza salvaje y, por "el arte de birli birloque", les han privado de la finalidad para la que fueron traídos a la vida por el Creador, cual es la de poner en la almazara una buena cosecha de aceitunas.
- No hay tranquilidad en mi interior. Por un lado, el fin natural de ese árbol tan noble y por otro, la estampa que tiene tras haberle metido la tijera dándole un aspecto de (...) con el que se pretende darle un aire nuevo, un aire que no es el suyo, un aire contra natura.
Claro que mi apreciación, es mía y el que no me agrade ver de esa guisa a esa joya de la foresta que, tan extraordinariamente beneficia al ser humano con el aceite que le suministra, no tengo nada que decir acerca del parecer de aquellos que les han llevado hasta sus jardines, con rango de vedettes, y, como a tales, los cuidan con esmero y dedicación y, para el que les guste, no dejan de tener su aquel.
De cualquier manera, en un territorio en que este árbol, el olivo, comparte protagonismo con el almendro, el que le hayan sometido a una coifeur semejante, choca, choca muy notablemente, por lo menos a mí.

Bien engrasado por el "tres en uno" que fabrican los de USA con nuestro aceite de oliva virgen extra y que nos compran por cuatro perras y nos venden a precio de ORO, sale a buscarte mi saludo, mis

          ¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
2.3.2019. Sábado. P. Alfonso Herrera, O. Carmelitana

3 comentarios:

  1. Buenos, dias P,Alfonso un comentario muy interesante siempre nos da informacion , de cosas que no sabemos feliz sabado

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  2. Muy buenos días, P. Alfonso, que relato tan amplio sobre el olvido y en un momento no se ha olvidado de Jesús en el huerto de los olivos, cuando oró y lloro sangre , Mr ha trasladado por allí creo que para todo el día tener esa imagen y ese recuerdo de Jerusalén. Que tenga un buen día.

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  3. El arte aplicado a la naturaleza ....que ya tiene su belleza propia y su desarrollo vital. ..pues a veces estropea y encima nos priva de sus estupendos frutos. Buenos días para ti también Padre Alfonso.

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