ESTAMPA CAUDETANA.
MAGNÁNIMAS.
Pasaban pocos minutos de las 19,00 horas. Me dirigía a la parroquia de Santa
Catalina porque me había sido adjudicada la celebración de la Eucaristía con la
que se despedía el Día del Señor. Desde lo alto de la torre de la parroquia
llegaba el sonido de las campanas volteadas por miembros de la Asociación
de Campaneros de Santa Catalina, pues hoy, por ayer, se celebraba en el orbe
católico la solemnidad de Jesucristo Rey del Universo y, por tal motivo, Juan
Doménech, el sacristán, no llamaba al culto, lo hacían ellos porque así lo
tienen establecido en su programación.
Nada más entrar en la plaza me llamó la atención que de los cuatro faroles que,
suspendidos de la columna de hierro que se levanta en el centro de la misma
fuente, dos estaban apagados. Enseguida supe por qué: Querían invitar a la luna
que, en todo lo alto del cielo, acababa de entrar en la Plaza de El Carmen. La
advenediza, que había llegado, en su crecimiento, a la mitad de su desarrollo
total, había sido invitada MAGNÁNIMAMENTE a unirse a las dos farolas encendidas
para que hiciera las veces de las dos farolas que se habían apagado para darle
la oportunidad de que tomara parte en la iluminación que merece la plaza más
linda de todas las que encuentran hueco entre las calles de la Real Villa de
Caudete, la del Carmen.
Qué buenas, pero ¡qué buenas! son las dos farolas encendidas de la fuente de la
Plaza del Carmen y qué buenísimas las dos farolas que, para cederle su puesto a
la recién llegada, decidieron apagarse. Han aceptado, con grandeza de espíritu
y con una generosidad fuera de lo común, que llama poderosamente la atención,
el que la luna se una a ellas para iluminar, al alimón, toda la plaza de El
Carmen.
Así lo vi, yo mismo, ayer por la tarde, ya noche cerrada, cuando salí de casa
para acercarme, por la calle Mayor, hasta la parroquia de Santa Catalina.
Cuando llegué a la Lonja volvieron a sonar las campanas volteadas por algunos
de los miembros de la Asociación de Campaneros.
Era el segundo toque de la tarde y todavía les faltaba sacarle el canto, a los
bronces de Santa Catalina, una vez más. Luego habrán de volver para dar a
conocer al vecindario de la Villa la fiesta de la titular, Santa Catalina
y las harán sonar en la antevíspera, víspera y Fiesta de la Santa
porque es la Titular de la Parroquia, a cuyo cuidado han venido estando
los habitantes de la Real Villa desde sus orígenes, desde que prendió aquí la
fe cristiana, y, ellos mismos, los de la Asociación de Campaneros, la tienen
como muy propia.
Recibe mi saludo, mis
¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
23.11.2020. Lunes. (1 090)
P. Alfonso Herrera Serrano, Carmelita.
Buenos días P. Alfonso. Esta visto que a usted no se le escapa nada y aquí está visto. Como de dos farolas de la fuente de la Plaza del Carmen que están apagadas va y nos hace un buen relato y lo relaciona con la luz de la Luna que las farolas le han cedido su espacio. Es admirable su imaginación para escribir algo bonito. Que pase un buen lunes.
ResponderEliminarMuy buenos días, P. Alfonso, si que ha conseguido de captar el momento de la posición de la luna en las farolas de la fuente de la Plaza del Carmen para saludarnos y demostrarnos su habilidad de observación y de buen redactador.Que tenga un buen día y principio de semana.
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