ESTAMPA CAUDETANA.
SEGUNDO DOMINGO DE SAN JOSÉ.
(Fotografía cedida por don Ramón Gisbert Conejero. Segundo Dolor y Segundo Gozo de San José. Azulejo existente en el Santuario de Torreciudad. Es obra de Palmira Laguéns.)
Ayer por la mañana cuando bajaba yo calle Molino abajo para llegarme hasta la
panadería, me crucé con un villano de Caudete
Que subía con una bandeja en la mano envuelta con papel de confitería. Con toda
seguridad habría alguna celebración festiva en casa y merecía el paseo
hasta la confitería y el cuidado, yo diría que el mimo, con que portaba la
mencionada bandejica. No había pasado mucho tiempo cuando volvimos a
encontrarnos andando con direcciones contrarias a las precedentes.
"Me he acercado a la iglesia del convento de San José para hacer una
visita a San José pues me pica la curiosidad por ver cómo ha quedado su imagen
tras la limpieza y, además, porque estamos en LOS SIETE DOMINGOS DE SAN
JOSÉ", me dijo.
Sí, mañana es SEGUNDO DE LOS DOMINGOS DEL BUENO DE SAN JOSÉ, le dije yo.
"Cuando era un ñaco, siguió diciéndome, subíamos hasta la iglesia
del convento de San José para celebrar los SIETE DOMINGOS EN SU HONOR. Recuerdo
que subíamos hasta el camarín de la Virgen"
Cierto, corroboraba el párroco que, presumo, serán quintos.
Aquel villano bajó acera abajo dirigiendo sus pasos para celebrar algún
acontecimiento festivo en su casa y hacerlo dando cuenta de los dulces que con
tanta prevención portaba en una de sus manos, como si se tratara de una bandeja
de camarero con alguna consumición.
Hoy celebramos EL SEGUNDO DE LOS DOMINGOS DE SAN JOSÉ.
El domingo pasado contemplábamos el primero de los dolores, "...resultó
que María, su esposa. Estaba en cinta..." y el primero de sus gozos,
"... lo que acontece en tu mujer es obra de Dios y no de ser humano
alguno. ...Tú le pondrás por nombre Jesús..."
Hoy el azulejo nos habla de un DOLOR MAYÚSCULO: Han llegado a Belén para
cumplir con el mandato imperial de inscribirse en un censo universal con María
saliendo de cuentas. Va el buenazo de José y tira, con desespero del ramal
de la acémila sobre la que cabalga Ella, su esposa en tal estado. Llega a la
casa de sus parientes belenitas y se encuentra que otros parientes han llegado
antes y la habitación de la casa donde dormía la familia estaba toda ocupada y,
el pobre se ve en la necesidad de acomodar a su mujer en un rincón del
cobertizo destinado a los animales.
Muy posiblemente el buen hombre José echaría una mirada hacia el cielo y le
diría a Dios Padre: "hasta aquí bajas a Tu Hijo" ,y,
seguramente, escucharía en su interior: "sí, hasta ahí, hasta lo más
bajito"
Y, otra vez, el bueno de José aceptaría sin rechistar más, la voluntad de Dios
Todopoderoso.
Pero el azulejo nos muestra, al lado, el SEGUNDO DE SUS GOZOS, a mi modo de
ver, el más grandioso de todos los GOZOS DE SAN JOSÉ, Ver en sus manos, antes
que nadie, al HIJO DE DIOS que le ha sido entregado a ÉL, NACIDO EN NUESTRA
CARNE, a Aquel que le había sido anunciado por el ángel, hecho que constituyó
el PRIMERO DE SUS GOZOS.
Ya, el buenazo de Él, no pensaba en las contrariedades vividas últimamente, ya
solamente EL NIÑO DIOS, EL HIJO DEL HOMBRE, llenaba toda su persona, todo su
ser. La alegría, El GOZO, de tenerle en sus manos, había fulminado el DOLOR
PREVIO, su SEGUNDO DOLOR teniendo como testigos de Aquel acontecimiento que va
a partir la Historia en dos, a los coros de los Ángeles, primero y, luego, ver
cómo llegan a darle pleitesía la gente sencillita que andaba cuidando, por
turnos, sus ganados. Más tarde aparecerían por la casa unos hombres de alcurnia
venidos de nadie sabía dónde a adorar al recién nacido.
Bueno sería que a la luz de este dolor y gozo del buenazo de San José.
Echáramos una miradita a nuestra historia personal tratando de descubrir cómo
la irrupción de Dios en nuestros planteamientos y proyectos siempre es para
bien pero, sin perder de vista, claro, que en todo caso, siempre, cuenta con
nosotros.
Recibe mi saludo, mis
¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
7.2.2021. Domingo. (C. 1.166)
P. Alfonso Herrera Serrano, Carmelita.
Muy buenos días, P. Alfonso, buen está que nos recuerde el segundo domingo dedicando a San José, con su segundo dolor y segundo gozo , como nos muestra ese manís tan bien reflejado. Que tenga un feliz domingo día del Señor.
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