sábado, 6 de agosto de 2022

El P. Xiberta


ESTAMPA CAUDETANA.

EL P. XIBERTA.

(Azulejo con el que se denomina una de las salas del claustro bajo, el barroco-toscano y que, en este caso, está destinada a la biblioteca del convento) 

No hace muchos días se dieron cita en Caudete miembros de distintas asociaciones culturales de la vecina Almansa y de la cercana villa murciana de Yecla. Venían a compartir un tiempo con miembros, también, de la cultura de esta Real Villa de Caudete, y como no podía ser por menos y por ser totalmente justificada su visita, se llegaron hasta el vetusto convento de San José (El Carmen) para contemplar la joya arquitectónica del barroco- toscano de la primera década del siglo diecisiete (1.606) que guarda esta villa caudetana.

Desde una de las ventanas de la planta primera observaba yo como se estaban "llevando" la joya a "trozos", pues, estaban impresionando con la cámara de sus telefonillos  significativos detalles del claustro bajo, el de la columnata Barroco-Toscana.


Después, concretamente el pasado día dos de los corrientes, llegaron a contemplar, también, el monumento conventual, un grupo de mujeres procedentes de la linda ciudad, capital de la autonomía catalana, de Barcelona, 


y, paseando su mirada sobre el monumento, una de ellas se fijó en el azulejo que daba nombre a una de las salas que suelen emplearse para dar catequesis, en este caso aquella en la que se encuentra situada la biblioteca conventual. En el azulejo estaba escrito P. B. Xiberta, padre Bartolomé Fantí Xiberta. Una de aquellas señoras una vez que había concluido yo la explicación pormenorizada de la historia del convento y los avatares que había pasado a lo largo de ella me preguntó:

- "¡Dígame! He observado que todas las puertas están dotadas de un azulejo en el que figura un nombre que, presumo, será de algún fraile carmelita y, entre ellos, he visto encima de aquella puerta, y me la señaló con el dedo, un azulejo con el nombre de P. Xiberta ¿se refiere, por casualidad, a un fraile que era catalán?"

(El P. Xiberta. Fotografía en la que se nos da a conocer que se encuentra incoado el proceso de beatificación y ya ha sido declarado venerable por la Santa Madre Iglesia.  Mediado el siglo pasado)

Me satisfizo en gran medida que aquella señora se interesara por él y le contesté

- Ciertamente. El P. Xiberta, ya murió en la década de los sesenta del siglo pasado. Fue un hombre eminentemente sabio que hizo estudios profundos sobre la teología del Sacramento de la Penitencia que dejó plasmados en su tesis doctoral. Su doctrina  teológica estuvo presente y fue tenida en cuenta en los debates conciliares del Concilio Vaticano II°. 

Durante la guerra del treinta y seis del siglo pasado, tuvo que exiliarse, fijando su residencia definitiva en el colegio de San Alberto en Roma. Primero por ser perseguido en virtud de las leyes antirreligiosas de la República (murieron asesinados tantos religiosos y religiosas en toda España y en Cataluña no fue menos, y, después, por no  compartir los planteamientos del régimen, principalmente en el campo de la lengua, que impuso el general Franco.

En Roma era frecuentemente visitado por gentes del pensamiento, y de la cultura españolas. Sé que fue muy amigo del filósofo Zubiri, al que unió en Santo Matrimonio en Roma.

Fue entonces cuando aquella señora, me dijo:

"Yo soy Clara Colás Migó, sobrina nieta del P.Bartolomé Xiberta, hija de Jordi Colás Xiberta, nieta de María Xiberta Toqueta y mis bisabuelos, los padres del P. Bartolomé Xiberta, fueron Joaquín Xiberta y Clara Roquetas. Mi padre era sobrino de aquel fraile".

Entonces les conté que yo tuve la oportunidad de conocerle en la primavera del año 1961 en que, acompañando al Padre general de la orden, él era, por entonces, el Consejero general para los conventos de habla hispana, y yo seminarista y cuando giró la visita al seminario carmelita de Nuestra Señora de el Henar en Cuéllar (Segovia) él, eminentemente cariñoso y comunicativo, se encontraba como pez en el agua en medio de aquellas chiquillería, éramos unos ciento cincuenta, y recuerdo unas palabras que para mí son imborrables, y, como si las estuviera oyendo ahora mismo, recuerdo que nos decía:

- "Todo Mariano, (seminarista carmelita), y todo carmelita, sin excepción,  debe profesar siempre una devoción acendrada y cariñosa para con la Virgen Santísima y continuó: Dios puede entrar en nuestro corazón cuando crea oportuno y le dé la gana porque es su creador, pero la Virgen no puede entrar porque es persona creada. Pero sí que entra cuando nosotros la llamamos, la invocamos y la rezamos. Así que, rezadla siempre para que Ella esté siempre en vosotros, en vuestro corazón".

Les conté un par de anécdotas que son de dominio público entre nosotros. Es sabido que el calor agobia enormemente y  merma las capacidades para desarrollar un quehacer. Ya te he dicho que él vivía en Roma y el ferragosto de allí no tiene nada que envidiar a nuestro agosto de aquí, de la Villa Caudetana y, por entonces, como ahora, hacía un calor fuera de lo normal aunque, para nada se hablaba de  "cambio climático" que parece ser el comodín, el lugar común, al que  acuden los politi"castros" del momento. El P. Xiberta era un trabajador empedernido y para poder trabajar como es debido tenía su técnica.Cuando el calor de su cuarto era insoportable y no le permitía trabajar, se subía a la terraza del colegio donde permanecía soportando un calor tremendo y, cercano a un golpe de calor, se bajaba a su cuarto al que encontraba bastante "acogedor" comparado con el que hacía en la terraza, y seguía trabajando.

También eran proverbiales su concentración y despiste, al mismo tiempo. Solía emplear cualquier elemento a su alcance para marcar una página en concreto y, uno de tantos días, él se subía o le subían a la habitación algo de comida para no interrumpir el trabajo y, he oído, que las sardinas fritas le servían como señaladores de textos para posibles citas.

Aquella señora se fue muy contenta y, enseguida puso en conocimiento de sus familiares en Barcelona, su experiencia tenida en el convento de San José de esta Villa al que vino a realizar una visita y se encontró con que, su tío abuelo el P. Bartolomé Xiberta, era tenido como un personaje de pro. Nada que extrañar, por otra parte, porque carmelita es el convento como carmelita lo fue él.

Recibe mi saludo, mis 

 

      ¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!

6.8.2022.Viernes.(C.1.543)

P. Alfonsa Herrera. Carmelita.

No hay comentarios:

Publicar un comentario