ESTAMPA CAUDETANA.
LOS
SÍMBOLOS.
Te preguntarás acerca de cuál es la razón por la que te
traigo este dicho de don Miguel Cervantes y Saavedra. Pues, mira, es fácil
deducirlo, porque, en esta Real Villa de Caudete aparecen, surgen
constantemente símbolos que nos llevan a otra realidad. Por ejemplo, el último
domingo del mes pasado tuvo lugar el comienzo de la NOVENA en honor de la
Virgen Nuestra Patrona de Gracia. Mediado el día de la Ascensión comenzaba a
asomarse, por lo alto de la torre de la iglesia parroquial de Santa Catalina,
EL PALO y, entre una efemérides y otra, los oficiales del Ilustrísimo
Ayuntamiento están colgando de las calles, comenzando por la mía de El
molino, multitud de elementos luminosos, con siluetas de soldados
cristianos y moros que nos están llamando la atención, nos están dirigiendo
hacia la celebración de las fiestas en honor de la Virgen María, Madre de Dios,
en su advocación de Gracia, patrona de esta Real Villa y Madre de todos los
caudetanos.
Y no otra ha sido la razón por la cual te he recordado aquel
dicho de Miguel de Cervantes, bien es verdad que, este dicho, no se adecúa a la
simbología presente, en la novena, el palo y los adornos que han de iluminar
las calles, con la simbología de aquellos que protagonizan dichos eventos
festeros en honor de la Virgen los conocidos como moros y cristianos porque si
Cervantes hablaba de algo pronto a terminar nosotros, en esta villa, ya de
alguna manera, no estamos prontos a terminar las fiestas en honor de la Virgen
de Gracia sino que estamos viviendo con antelación las tan esperadas
fiestas. Por lo que, según mi parecer, son signos, manifestaciones, claros del
gran acontecimiento festivo en el que se involucrará toda la población de la
villa, en los primeros días del mes de septiembre en torno a Ella, a la Virgen
de Gracia.
Así que, los tres símbolos que te he citado tienen
toda su razón de ser:
El primero, LA NOVENA, nos introduce en una relación cercana
amorosa con Ella, con la Virgen Santísima, porque, por medio de la oración la
estamos llamando, para que venga a nuestros corazones, a nuestra Villa, a
nuestro ámbito para que comparta con nosotros nuestra existencia.
El segundo de los símbolos, EL PALO, sirve para llamar la
atención de propios y extraños ante la inminente llegada de las fiestas del
lugar.
Y el tercero de los símbolos en los que aparecen figuras de
guerreros cristianos y moros, nos plantan en medio del fárrago de una guerra
que no es guerra, sino la fiesta de todo un pueblo que, tomando parte en cada
una de las comparsas y de sus escuadras, constituyen la celebración material
festera, eso sí, se ofrece y ofrenda a la Madre del Señor Nuestra Señora,
la Virgen de Gracia.
Recibe mi saludo, mis
¡¡¡¡¡¡BUENOS
DÍAS!!!!!!
17.8.2022. Miércoles. (C. 1.550)
P. Alfonso Herrera. Carmelita.
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