ESTAMPA. CAUDETANA.
LO LLEVAN EN LA SANGRE.
Acababa de concluir la Eucaristía celebrada en la parroquia
de San Francisco allá en el barrio del mismo nombre cuando empezaron a
introducirse por la puerta de la misma el repiqueteo de tamboriles y tambores.
Por ser viernes de cuaresma, una vez finalizada la misa
tiene lugar el santo ejercicio del Vía Crucis a lo largo de quince estaciones
los asistentes al mismo van acompañando a Jesús por el camino del Calvario
hasta su misma muerte en la cruz.
Se recrea a lo largo de catorce estaciones de que consta
dicho ejercicio piadoso se van contemplando meditando o reflexionando acerca de
cada uno de los hechos que tuvieron lugar en aquella macabra procesión. Pero no
todo termina en el momento en que Jesús exhaló su espíritu nos entregó su
espíritu sino que se le ha añadido en los últimos tiempos una estación más la
decimoquinta en la que se contempla al señor triunfante de la muerte en el día
de la Pascua en el día de la resurrección.
La oración contemplativa del viacrucis estuvo acompañada por
el repicar de los tambores en la calle.
Al oír la percusión sobre las pieles de los instrumentos
musicales pensaba yo que un grupo o una banda de tamboriles y tambores estaban
ensayando, ya, para la próxima Semana Santa y, mira por dónde, estaban poniendo
música al piadoso ejercicio litúrgico que tenía lugar dentro de la parroquia en
aquellos mismos momentos, mismamente como si fueran abriendo una de tantas
procesiones o, en su caso, caminando detrás del paso, cerrándola.
Cuando salíamos de la Iglesia, se movía un airecillo
fresquito y allí nos los encontramos frente a la puerta del garaje de la
casa aledaña al jardín parroquial.
Antonio Doménech Conejero, con palillos en mano, ejercía de
padre e instructor llevando el ritmo con su tamboril de sus hijos, Javier y
Ana, y de tres amigos, Pablo, Elías e Izán, .
Pregunto al padre y director:
.- ¿Ensayando?
.- Sí, nos preparamos para salir en las procesiones en
Semana Santa.
.- Puedo gravar una pieza y publicarla mañana en mis buenos
días?
.- Claro que sí. Faltaría más.
Tocaron para mí y ahí te mando el arte que tienen estas
criaturas, LO LLEVAN EN LA SANGRE.
Allí se quedaron los jovencitos intérpretes bajo la dirección de un padre entusiasta aprovechando el tiempo antes de que aumentara el frío cuando "pusimos los pies en polvorosa"
Recibe mi saludo, mis
¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
25.2.2023. Sábado. (C. 1.641)
P. Alfonso Herrera. Carmelita.
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