ESTAMPA CAUDETANA.
LA VIRGEN PEREGRINA DE LOURDES EN EL MONASTERIO DE LAS
MADRES CARMELITAS DE CLAUSURA.
Cuando en la tarde de ayer, una tarde de primavera avanzada,
me acerqué hasta el monasterio de las monjas Carmelitas de clausura para cerrar
el manifiesto que, como cada domingo, llevan a efecto las monjas carmelitas de
dieciséis a dieciocho horas, contemplé, desde la misma puerta, el presbiterio.
Sobre el altar se encontraba expuesto, en la custodia, el Santísimo
Sacramento.
En el paño frontal, en su parte alta, situada sobre una
peana, la imagen bendita de la Virgen del Monte Carmelo y, a la derecha del
presbiterio, allí donde la pared se abre y deja ver el espacio reservado para
el coro bajo de las monjas, habían dispuesto, las moradoras del monasterio, un
altarcico sobre el que se encontraba la imagen peregrina de la Virgen de
Lourdes.
Ya te he hablado, con anterioridad, acerca de que, desde el
17 de febrero hasta el 13 de mayo, va a estar esta imagen, que se venera en la
parroquia de San Francisco de la capital albaceteña, peregrinando por todas las
villas, pueblos y aldeas de la diócesis debido a que se conmemora, este año, el
cincuenta aniversario de la fundación de la Hermandad Hospitalaria encargada de
llevar a efecto los trenes de la esperanza hasta el lugar, al norte de los
Pirineos, donde tuvo a bien visitarnos, en la persona de Bernardette
Soubirous, la Madre de Dios, la Virgen Santísima, en Lourdes.
Esta imagen ha permanecido en la Villa, con nosotros,
desde la mañana del viernes pasado, día 17, hasta el día de hoy en que, a las
diez horas y media, saldrá del monasterio y de la Villa con dirección a
otros pueblos, a otras villas, a otras aldeas de la diócesis albaceteña.
En la Eucaristía del viernes celebrada en la parroquia de
Santa Catalina el sacerdote celebrante dio la bienvenida a la Sagrada Imagen y,
concluido el rito, fue trasladada por los miembros de la Hermandad de los
Enfermos existente en esta Real Villa de Caudete, hasta la residencia de
ancianos donde pasó la noche en su capilla y presidió la Eucaristía y la
dispensación del sacramento de la Unción de enfermos a aquellos residentes que
lo desearon. Concluido el rito fue trasladada, nuevamente, a la parroquia donde
a las 12 del mediodía tuvo lugar la imposición del santo óleo de la Unción de
enfermos y el rito del agua, tal y como se viene haciendo en Lourdes
desde que la Virgen María se lo mandó hacer a Bernardette.
El encuentro de los fieles con la Virgen Peregrina
representada en su imagen, concluyó con la comunión de los fieles que, en
gran número, asistieron al acto.
Ya no se movió de la parroquia y presidió la Sagrada Imagen
la celebración festiva del cuarto domingo de Cuaresma en la tarde del
sábado.
El domingo, todavía en el lugar de honor del presbiterio de
Santa Catalina, presidió la celebración de la Eucaristía parroquial a la que
asisten los niños que se preparan para la primera comunión. Dicha Eucaristía es
presidida siempre por el párroco de ambas parroquias existentes en la villa el
carmelita natural del lugar P. Luis Torres Pérez.
Al término de la celebración litúrgico-eucarística de las
doce horas la Sagrada Imagen fue trasladada hasta el monasterio de las monjas
Carmelitas de clausura donde presidió el manifiesto, es decir, la adoración al
Santísimo Sacramento expuesto en la custodia que tiene lugar cada domingo desde
las dieciséis a las dieciocho horas acto al que asisten, junto a las monjas,
fieles devotos de la Eucaristía.
En el día de ayer el grupo de personas que viene asistiendo
siempre se vio incrementado en gran número debido, creo yo, a la presencia de
la Imagen de la Virgen Peregrina de Lourdes en la iglesia del monasterio.
Con el Santísimo expuesto, la madre priora, desde lo alto
del coro, dirigió el rezo del Santo Rosario, oración que, Ella, la Virgen
Santísima, Madre de Dios y Madre nuestra, no se cansa de pedir insistentemente
en cada una de las manifestaciones o apariciones a lo largo y ancho de este
mundo, que se rece.
Recibe mi saludo, mis
¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
20.3.2023. Lunes. (C. 1649)
P. Alfonso Herrera. Carmelita.
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