La Procesión del Corpus Christi

ESTAMPA CAUDITANA. 

LA PROCESIÓN DEL CORPUS CHRISTI.

Tal y como estaba estipulado salió el Santísimo de la parroquia de Santa Catalina en su carroza bajo el templete en el viril de la custodia que tantas veces le ha llevado en procesión por las calles de la Real Villa de Caudete, tal día como el de ayer, y también en la mañana del Domingo de Resurrección donde él, resucitado, sale al encuentro con su madre para escenificar aquel abrazo inenarrable que fundió en uno al Hijo con la Madre, tras surgir del mundo de las tinieblas, en la mañana del primer día de la semana, resurgiendo así de la muerte.

Echó a andar la procesión con el Santísimo una vez que concluyó la Eucaristía previa a la que asistieron los niños que habían recibido a Jesús, estos días de atrás, por primera vez y las autoridades civiles y militares de la villa acompañando a la Cofradía de la Sacramental al frente de la cual se encontraban su señora Presidente doña Teresa Albertos.

A las ocho de la noche, cuando emprendió su camino el Santísimo, hacía calor la ropas talares hicieron que aflorara el sudor. Un servidor acabó con la camisa totalmente empapada.

En esta villa no hay altares jalonando el trayecto que siguen la procesión con el Santísimo pero no por ello deja de haber sus paradas para llevar afecto la adoración del mismo. Fueron cuatro. La primera en la avenida de la Virgen de Gracia frente al manís desde el que nos contemplaban los santos patronos de la Villa, la Virgen de Gracia y San Blas. La segunda fue frente al Ayuntamiento. En el trecho donde tiene lugar la parada de la carroza con el Santísimo frente a la puerta del Ayuntamiento. El señor Alcalde, solo él, había diseñado y realizado un motivo eucarístico. Este que ves y que me ha sido remitido por la presidente de la Cofradía de la Sacramental.

En los últimos años viene realizándo el motivo eucarístico, el señor Alcalde, junto a otros voluntarios, pero este año, no. Este año fue sola y exclusivamente, él, quien lo diseñó y lo pergeñó.

La tercera parada se llevó a efecto en la cuesta empinada por la que discurre la calle Santa Bárbara y, una cuarta, tuvo lugar, ya bajando por la calle Abadía en busca de la Lonja para entrar en la Plaza de la Iglesia y por ella a la parroquia de Santa Catalina. 

Abría la procesión la cruz del Señor seguida de el guión de la Cofradía de la sacramental que, por cierto, es nuevo y fue bendecido por el sacerdote celebrante al finalizar la eucaristía precedente. Luego iban los niños que habían recibido al Señor, por primera vez, estos días de atrás, todos ellos vestiditos con los trajecitos estrenados en aquel gozoso día de su primer encuentro con Jesús sacramentado.

El estandarte, los cofrades de la Sacramental, a los que seguía la carroza con el Santísimo, el clero compuesto por el párroco, Luis Torres Pérez, el coadjutor, Antonio Graciá Albero, que  iniciaba los cantos eucarísticos en cada una de las paradas, el sacerdote secular, Ramón Gisbert Conejero, los tres naturales de la villa, un servidor y José Antonio, el monaguillo. 

Detrás circulaban las autoridades civiles y de orden público y cerraban la procesión los maestros de la banda de música oficial de laVilla. Esta banda recibió al Santísimo a la salida de la parroquia y le despidió a la entrada entonando el himno nacional. Durante toda la procesión, salvo en los momentos dedicados a la adoración del Santísimo en las cuatro paradas, acompañaban con su música el ir procesional por las calles del lugar.

No faltaron fieles que desde un principio acompañaron al Señor formando hileras por las aceras pero muchos más fueron los que esperaban en las mismas aceras a que llegara y pasara delante de ellos la carroza con el Santísimo Sacramento. Otros muchos lo hacían desde los balcones y ventanas que arrojaban pétalos de rosas, al paso del Señor. 

Una vez concluida la procesión el señor párroco impartió la bendición con el Santísimo y despidió a los fieles a los que agradeció su presencia y participación. 

Fue un acto de fe entrañable de las gentes de la villa caudetana.

Éste reportaje gràfico me fue remitido por Paco Cantos Albertos, "el nieto de Bienvenido".

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 ¡¡¡BUENOS DÍAS!!!

3.6.2024. Lunes. (C.1912)

P. Alfonso Herrera. Carmelita.