Las Cuatro Mosqueteras

ESTAMPA CAUDETANA.
LAS CUATRO MOSQUETERAS.

    El día anterior enviaron un emisario. Un hermano se les adelanto. Pero esta mañana ellas, con un esfuerzo ímprobo, se estaban terminando de abrir a la vida.
- Después del milagro acontecido en el transcurso de la noche, estaban ahí las cuatro, como cuatro mosqueteras, esperando a que viniera su Dartañán.  ¿Cómo te diría yo que estaban? modositas, a la espera de que el mocito, todo vestido de luz, asomara por encima del tejado de la escuela de música a echarlas un piropo, a vestirlas con su luz para que así pudieran brillar en todo el espectro del corralón del convento de San José (el Carmen).
- Parecíales que el mozo celeste andaba un poco remiso esta mañana, pero no,  llegó puntual, como cada día, y se colocó en todo lo alto del corralón, no podía ser de otra manera. Le era necesario para verlas. Y es que, merecía la pena  porque cuatro preciosidades, cuatro, se habían puesto sus mejores galas para entrar en el baile de la vida en medio de la oscuridad de la noche, en su silencio más elocuente porque, como no era fin de semana y, en el pueblo, el ambiente estaba tranquilo, sin gritos, sin ruidos. Nada desentonaba, nada, todo estaba quieto, sumamente quieto, para que los cuatro capullos de la echinopsis de la jardinera, de una de las ventanas que dan al corralón, rompieran los velos de su noche primigenia y salieran a vivir. Sí, como cuatro adolescentes esperaban  la llegada de su doncel y con él su abrazo de luz, y de calor, en el que fenecerán de amor.

Te saludo y te envío mis

          ¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
7.9.2019. Miércoles. HOY ES SAN ALBERTO DE SICILIA, CARMELITA. 

P. Alfonso Herrera, de la Orden Carmelitana.