jueves, 5 de diciembre de 2019

La mejor de las partes de la COP.


ESTAMPA CAUDETANA.
LA MEJOR DE LAS PARTES DE LA COP.
Mucho bla, bla, bla. Mucho cacareo improcedente (el cacareo procedente es el de aquellas gallinas que proclaman a los cuatro vientos que han depositado su huevo diario).  Mucha palabrería y mucha polución dejando detrás de sí por los cielos para llegarse a Madrid y más polución al Manzanares, que la depositará en el Jarama y, éste, a su vez, al Tajo que, seguro, bajará estos días, por la Imperial Toledo, ahíto de la caca, la que nos dejan tanto asistente, eso sí, bien tapadita por muchos centímetros de espuma que no es, precisamente, blanca, que digamos. Y los patrocina a esta barahúnda de representantes de muchísimos países la ONU de la que ha venido su Secretario General, el portugués Sr. GUTERRES.

Vamos a ver si esta vez llegan a algo concreto que justifique tanto movimiento en bien del medio ambiente para que el Clima se encuentre agustico y deje tranquilo al hombre y a toda manifestación de vida, claro que si no se concientiza el más debastador y contumaz depredador de todos, el mismo ser humano que se queja tanto...
Revolotea en mi cabeza aquel dicho: "ENTRE TODOS LA MATARON Y ELLA SOLA SE MURIÓ". Y próximo está a cumplirse aquel otro que afirma,:
"MUERTO EL BURRO, LA CEBADA AL RABO"  y todavía es lucero brillante aquel otro que asevera: "A MÍ PLIN, LAS QUEJAS AL LUCERO DEL ALBA".
Deberían, deberíamos mirar un poco al cielo como hiciera el patrón de los poetas españoles, San Juan de la Cruz, carmelita para más señas, y, ver, como vio él, cómo ha ser la actuación humana en el campo de la naturaleza que es la paridora del clima. A la pregunta que hace la esposa (el alma) a las criaturas sobre su esposo,(Cristo), éstas la responden:
"Mil gracias derramando,
pasó por estos sotos con presura,
y yéndolos mirando,
con sola su figura,
vestidos los dejó de hermosura"
(Estrofa 5 del Cántico Espiritual).
El ser humano ha sido creado a imagen y semejanza de Dios y tal como hizo su Creador, tal debería hacer. Pero no. Debe hacerse como a uno le parece bien (USA, CHINA, INDIA...) o pasando olímpicamente de lo acordado, asumido y firmado (los demás) y así nos encontramos con negros vahos que  envuelven grandes ciudades, oscuridades en pleno día, desechos, suciedades, trampas para animales y abundantes desechos plásticos que llenan todos los mares y las tierras emergidas, todo el globo terráqueo. Así pasa la copia divina, el hombre, por los sotos y espesuras, llenándolos y, no precisamente, de hermosura, sino de destrucción y de muerte.
Nadie habla de la gran cantidad de materia que es eliminada (petróleo, carbón), quemándola, aligerando así la masa terráquea y saturando de gases desprendidos, en esa quema, la atmósfera, por mano del hombre.
Encabezan mis "buenos días" las fotografías de "ESA PARTE" (COP=Conferencia de las Partes, [países que participan y se comprometen en la prevención de la  defensa del Clima]) que no participa en la Conferencia madrileña pero que es un agente importante entre los que trabajan por el medio ambiente. Es una de las tres higueras que crecen en el corralón del convento de San José (El Carmen). Hoy la ves totalmente desnudita, diríase que ha dejado caer a la alfombra sus vestidos. Y, sí, se dispone a descansar y a reponer fuerzas. En primavera nos dejó ver unas yemas verdecitas por las que salieron a la vida unas hojas hermosas, grandotas, como aquellas de las que se sirvieron Adán y  Eva para taparse cuando, por desobedecer, se vieron desnuditos (Génesis 3, 7).
Esas hojas son el fruto de una labor callada llevada a cabo por la higuera a través de sus largas raíces extrayendo de la tierra minerales que, disueltos, suben hasta sus  yemas desde donde salen unas hojas muy grandes, que son la admiración de los que las ven, a vestir la higuera donde tiene lugar el milagro de la fotosíntesis por la que esa sabia bruta, rica en nutrientes, transmutan en rico alimento que nutrirá al árbol y lo llenará de fruto, de higos gordos del color del buen vino tinto de la tierra, que luego se convertirán en rica mermelada y en bolas congeladas que se irán consumiendo durante el invierno.
Ahí donde la ves, toda desnuda, es un milagro. Claro, es obra de Dios. Y, en ese milagro acontece que ella se come la suciedad que el hombre por sí o con su actividad industrial,  y otros seres vivos echan al aire, el famoso y pernicioso Co2 con el que lleva a efecto la fotosíntesis y, además, lo cambia por oxígeno que nos viene de perillas para respirar. Ese gas malo, fíjate, es el motor del crecimiento de la planta y de la fructificación.
Nos ofrece su sombra aunque tiene mala fama y, para que no te haga daño a ti, tienes tú que herirla a ella primero (¡Qué cosas!), me dijo el nieto de Bienvenido. Con su sabia elaborada, "la leche", te quema las verrugas, me dijo Juan, el sacristán de Santa Catalina. Y después de haber alegrado la primavera, el verano y el otoño, no tiene reparo alguno en desnudarse totalmente para pagar con una generosidad única, porque lo hace consigo misma, los minerales que le tomó prestados a la tierra, ya que, al echarle todo su follaje, se los devuelve enriquecidos, puesto que sus hojas no son otra cosa que eso, que un verdadero almacén de minerales, los succionados a la tierra que la sustenta y mantiene firme y segura contra el ímpetu de los ventarrones que se cuelan en el corralón donde ella vive como lo que es, como una princesa.
Además:
Con su entramado de raíces de ocho metros sujeta la tierra impidiendo que los golpes de agua la arrastren.
¿Es o no milagro?  pues, claro, es obra de Dios y no de los hombres. Y además muy bien pensado: primero crea el agua, luego hace subir la tierra por encima de ella y ese es el momento de poner las plantas, hierbas y árboles. De otra manera las plantas no hubieran podido vivir. (Génesis 1,11-13)
Y, todo, todo, sin ensuciar ni dañar nada de nada.
Sí, como nos recomendaba San Juan de la Cruz nos es necesario vestir la naturaleza de hermosura.
Ella tenía que estar en esa concentración para la COP,(Conferencia de Partes) de gentes de toda índole y condición porque, sola, hace, por el clima y la naturaleza, muchísimo más que todos los que se dieron cita en Madrid.
¿O no?

Recibe mi saludo, mis

          ¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
5.12.2019. Jueves
P. Alfonso Herrera Serrano, Carmelita.

4 comentarios:

  1. Brillantes palabras sabiamente enlazadas repletas de contenido artísticamente conformadas.
    Un grito silencioso a cuidar nuestro entorno para los que vienen detrás y también para nosotros.
    Buenos días, Padre.

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  2. Gracias por esos mensajes sabrosos y críticos.

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  3. Es un lujo pasear por el viejo corralon del venerable Convento de San José.

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  4. Muy buenos días, P. Alfonso, sí, todo en la vida es un milagro, como hoy nos describe el ejemplo de la higuera. Pero las personas estamos destruyendo el planeta, pongamos un poco lo que nos corresponda de nuestra parte, reciclando para que dejemos un planeta lo más limpio posible. Que tenga un buen día.

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