ESTAMPA CAUDETANA.
VOLVIÓ EL FRÍO.
Anoche al volver hacia casa, el reloj digital de la farmacia de la Plaza de El
Carmen marcaba, con dígitos de luz de color, las 20,36. Tras permanecer unos
segundos mostrando la hora, dejaba el puesto a los dígitos que daban a conocer
a los viandantes, yo solo por la calle Mercado a punto de entrar en la Plaza de
El Carmen, la temperatura reinante en la zona, en la Plaza de El Carmen,
Mercado, Mayor, San Antón, Moreras y Molino.
La cruz verde luminosa, que es señal de la presencia de una oficina de farmacia,
marcaba 9°, tres menos que en el día anterior a la misma hora.
Un rato antes habíamos salido de la parroquia de Santa Catalina. Los feligreses
asistentes manifestaban en la puerta que se había experimentado un sensible
descenso de la temperatura respecto del día anterior y, a pesar de ello había
que aprovechar el haber salido de casa para dar un paseico con el fin de
estirar las piernas tras todo un día encerradito, decía Cande la del Paolo, de
nombre de pila Joaquín, el pintor, su marido ponía las cosas en su lugar:
"no es tanto el frío, lo que pasa es que nos visita un viento de Levante
que viene cargado de humedad y, ésta, hace que la sensación de frío se
acreciente.
No le faltaba razón a Paolo porque por la calle Santísimo Sacramento se estaba
colando en la Real Villa de Caudete el "yeclano". El tal yeclano no
es otra cosa que un viento que viene por el camino que une al pueblo vecino, ya
en la región murciana, con la Villa caudetana, que no trae nada bueno y que en
mi pueblo llamaríamos "traicionero". Ya te he relatado lo que me fue
contado por alguien muy versado en eso de la Historia local, que ese viento
hizo verdaderos estragos en la tropa del infante Don Alfonso cuando en aquel
lejano siglo XIII, acampó extramuros de la Villa, justo allí por donde llegaba
el vientecillo de marras sembrando pulmonías a diestro y siniestro en la
soldadesca que acompañaba al que, más tarde, accedería al Trono de
Castilla con el nombre de Alfonso X el sabio.
El caso es que, sí. Sí que se notaba el frío y quedaba a las claras que así era
porque la Plaza estaba desierta a aquella hora, salvo un hombre que, a grandes
zancadas, iba poniendo, rápidamente, terreno de por medio, para guarecerse en
su casa, como puedes ver en la fotografía de la plaza, si te fijas con atención.
Recibe mi saludo, mis
¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
6.2.2021. Sábado. (C. 1.165)
P. Alfonso Herrera Serrano, Carmelita.
Muy buenos días, P. Alfonso, sí, ha vuelto el frío , como bien dice usted , ésto es más normal estamos en plena cosecha de ello. Que tenga un buen fin de semana.
ResponderEliminarBuenos días,P.Alfonso,fría y sola está la plaza,pero preciosa imagen ha captado de ella.Me gusta mucho esa foto,felicidades y gracias por compartir .
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