El Árbol de Santa Ana.

ESTAMPA CAUDETANA

EL ÁRBOL DE SANTA ANA

Ayer subí hasta lo más alto del pueblo me habían hablado de que, como en otros lugares de la Real Villa de Caudete, el Ilmo. Ayuntamiento había plantado un árbol de luz y, claro, hasta allí me subí. No me arrepentí de tirar por la calle San Joaquín arriba para luego tomar Calvario. Y, sí, allí me presenté para encerrar dos preciosas instantáneas del árbol de luz en la cámara oscura de mi telefonillo y poder traérmelas con el fin de acercártelas después de prender en él, como una lucecita más, mi saludo mañanero.

Son dos guapas estampas de esta Villa. Una, dando y recibiendo luz al y de la imagen del Sagrado Corazón de Jesús que, esculpida Andrés Martí Sánchez, conocido como "el Poro", se encuentra situada, desde hace más de 70 años, en todo lo alto de la fachada frontal de la ermita dedicada a Santa Ana, cúspide de la Villa, desde donde nuestro Señor tiene, a sus pies, toda la población aunque, en este caso, el decir popular no se adecúa a la realidad pues, en el caso de Jesucristo, Nuestro Señor, falla estrepitosamente porque Jesús, no tuvo a ninguno de sus hermanos a sus pies, sino en su corazón, tal y como nos lo da a entender su imagen en todo lo alto de la ermita de Santa Ana que, además, es el lugar más alto de la Villa, desde donde nos pregona que, en sus brazos abiertos y en su corazón, cabemos todos. Ya nos lo dijo con palabras indelebles y con hechos contundentes en un momento importante cual fue el previo a compartir con sus discípulos y, aunque no nos lo dicen los evangelios, con su Madre, la última cena, la cena de despedida porque los días de su vida compartida con sus hermanos estaba en los últimos momentos: "Si yo, el Señor y el Maestro, me he bajado a vuestros pies y os los he lavado (labor reservada, en aquellos tiempos, a los servidores, esclavos de baja estofa, en las casas), haced vosotros lo mismo" (Jn. 13,14). 

La otra estampa es la que nos muestra dando luz a las lucecicas que aparecen, como estrellitas, sembradicas aquí y allí, en la Villa inmersa en la profundidad de la noche, emulando a una de tantas galaxias de esas que corretean por el universo.

Recibe mi saludo, mis 

 

      ¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!

16.12.2022. Viernes. (C.  1.626)

P. Alfonso Herrera. Carmelita.