Alegre Algarabía.

ESTAMPA CAUDETANA.

ALEGRE ALGARABÍA.

En la mañana de ayer una marabunta de vida entró a chorro por la puerta del vetusto convento de San José, un montón de niños acompañados por sus mamás y algún que otro familiar llenaron con sus gritos, sus correrías y sus juegos el noble claustro barroco toscano de este convento.

Habían sido convocados por el presidente de la Asociación de Cofradías y Hermandades afincadas en esta Real Villa de Caudete para que emplearan unas horas preparando, a su manera, la celebración festiva de los acontecimientos salvíficos que el orbe cristiano celebra dentro  de la Semana Santa que comienza en el día de hoy.

Pusimos a su su disposición todas las salas que abren sus puertas al claustro para que en ellas, puestos de rodillas en las sillas y provistos de sus lapiceros, reglas, compases, tijeras y pegamentos hicieran capirotes semejando a los que tienen vistos, y van a ver, en los cofrades que procesionesan con los distintos pasos en los que se representan los distintos momentos de la Pasión de Jesús y de los personajes que tomaron parte en tan grandioso acontecimiento, y que recorrerán las calles de la villa en el sucederse los días de  esta semana.

Por razones obvias no ilustro estas letras con los niños, verdaderamente enganchados, en el trabajito que les había sido propuesto para entretener unas horas de la mañana de ayer. Pero sí te muestro, en las manos de una mamá exultante de gozo, el resultado del trabajo de su niñico: unos caperucicos de papel.

José Antonio Milán es un hombre de ideas que trata de llevarlas a la realidad y la verdad es que lo consigue satisfactoriamente en beneficio de las gentes de la villa principalmente de aquellos que, por ser chiquitines, no tienen una presencia importante en el desarrollo de las actividades religiosas y de fe que salpican cada uno de los días de la Semana Santa Caudetana. 

Hace unos pocos años implantó, a la limón con el párroco padre Luis Torres Pérez, carmelita, la procesión de los niños con la imagencica del paso del Ecce Homo portada a hombros del gremio infantil. El año pasado se las agenció para encargar un paso nuevo, a medida de los niños, El Cristo de la Caída, para que, como en el caso anterior, fuera portado por ellos.

Con todo ello busca el señor Presidente de Cofradías y Hermandades imbuir ya desde la infancia en los niños es el gusanillo por el gusto de la celebración festivo religiosa de la Semana Santa.

No creo exagerar al decirte que, si alguien hubiera escuchado desde la calle LA ALEGRE ALGARABÍA que se estaba produciendo intramuros del convento, muy bien podría haber pensado que los moradores del mismo habíamos montado, con antelación, el viaje de Jesús desde la otra orilla del Jordán, pasando por Betfagé y el Huerto de los Olivos, según tenían ya anunciado los profetas, que sería el camino por el que accedería el Mesías a la Ciudad Santa  de Jerusalén y al templo, adelantando, en un día, la procesión del Domingo de Ramos que se celebra litúrgicamente en el día de hoy.

No, no fuimos los moradores del convento los que armamos tal ALGARABÍA, los artífices  fueron los niños, ellos fueron los protagonistas de tal evento.

Recibe mi saludo, mis

¡¡¡BUENOS DÍAS!!!

24.3.2/24. Domingo. (C.1.844)

P. Alfonso Herrera. Carmelita.