miércoles, 3 de julio de 2024

Gazania Rigens.

ESTAMPA CAUDETANA. 

GAZANIA RIGENS. 

Bajaba yo el domingo por la tarde avenida de la Virgen de Gracia abajo cuando, mirando a mi derecha, me vi gratamente sorprendido ante la vista de unas florecillas de GAZANIA RIGEN, que se elevaban por encima de sus hojas subidas al el final de unos pedúnculos que se cimbreaban movidos por el suave impulso que los daba una brisica que hacía muy agradable la tarde.

No sé si te acordarás pero, ya, el invierno pasado, me serví de esos mismos tiestos para acercarme a ti y saludarte, al inicio de uno de tantos días. Pero entonces no había flores. Entonces había gatos. Sí, dos gatos uno en cada florero tomaban, plácida e indolentemente, el sol. Allí acurrucadicos pasaban olímpicamente de lo que acontecía en la Avenida de la Virgen de Gracia. 

Recuerdo que cuando me detuve para hacerles una foto, ni se movieron, ni hicieron amago de salir por patas. Me vieron trajinar con el teléfono para sacarles una foto a unos escasos dos metros y, como quien no quiere la cosa, ni les importaba, ni tanto así, aquellos que cruzábamos junto a la verja de la puerta de entrada a la vivienda. 

Pasaron olímpicamente de mí, aunque yo no lo hiciera de ellos. 

Yo pienso que el pajonal en que estaban convertidos los tiestos, este invierno pasado, duro tributo que pagan muchas plantas cuando los fríos invernales hacen su presencia, les servía a ellos de colchoncico mullido donde pasaban el rato, porque, como es sabido, estos animales de pelo son muy frioleros, no hacen buenas migas con el frío.

Guapas estaban las GAZANIAS RIGEN, la tarde del domingo pasado y como hiciera cuando en esos "florecían" unos gatos, estos, levantados sobre sendas columnitas de las que parten las barandillas de la escalera que llevan a la puerta misma de la casa, hice con las flores. Las guardé en la cámara oscura de mi telefonillo para hacerlas

mis mensajeras con el fin de que te acerquen hoy mi saludo, mis


¡¡¡BUENOS DÍAS!!!

3.7.2024) Miércoles. (C 1.943)

P. Alfonso Herrera. Carmelita.

No hay comentarios:

Publicar un comentario