ESTAMPA CAUDETANA.
DÍA DE LA CONSTITUCIÓN.
Antes de que se vaya el año la Constitución española se nos presenta y nos concede un día de asueto, de vacación. Pero no viene sola porque dos días después celebramos desde, muy antiguo a la patrona de España a la Madre del Señor en su advocación de la Purísima Concepción. Aunque las opciones políticas que gobiernan las distintas autonomías del país hacen y deshacen, hacen de su capa un sayo, y se montan las fiestas teniendo en cuenta otros planteamientos que no son los ancestrales. Y así tenemos que, en algunas autonomías, en lugar de celebrar la fiesta de la Inmaculada, patrona de España, la cambian por otras opciones. Para aquellos que sí la celebran, la Constitución y la Purísima Concepción constituyen un puente maravilloso para salir de la monotonía de cada día y plantarse en otros lugares para empaparse de Cultura o, en su caso, para relajarse plácidamente, ya sea la vera del mar, ya sea en la montaña, ya sea en las casas rurales o saltando a otros lugares del mundo haciendo turismo.
Esta mañana, después de haber celebrado la Eucaristía en la iglesia del monasterio de las monjas Carmelitas de clausura, que por estos pagos llaman "las encerradas", volvía yo para casa y en la calle Dos de Mayo me la encontré. Me encontré a la BANDERA ESPAÑOLA movida por un suave vientecillo que no era dañino, ni malo, ni siquiera frío, como lo fueran sus colegas de ayer y de antes de ayer que se colaban, inmisericordes, hasta los huesos, si te descuidabas un poco.
Ese vientecillo movía alegremente la bandera ondeándola y, claro, me llamó la atención. Eché mano del telefonillo y la sorprendí de esa guisa que ves en el vídeo: alegre y contenta, chispeante, diciendo al paseante:
"hoy es fiesta, es fiesta grande en España, es el Día de la Constitución, es el día en que a todos se nos recuerda que tenemos un amparo legal para todos y un imperativo legal que marca los límites y enseña los caminos por donde debemos ir los rspañolrs para ser una sociedad moderna, eminentemente democrática, abierta al encuentro con los demás que, junto con nosotros mismos la hacen posible, constituimos la Patria".
Hoy, 6 de diciembre, es un día para la celebración, es un día para la fiesta, es un día en el que estamos llamados a dejar diferencias y buscar lo que nos une, a empujar hombro con hombro, todos juntos, en la misma dirección sin dejar atrás a aquellos que por una razón de su otra no están capacitados para seguir el camino de los demás. Son nuestros pobres nuestras necesitados porque ellos, con nosotros, hacen patria.
Y, hoy, más que nunca, debemos tener en cuenta a los damnificados por el turbión de agua, maleza y barro que se ha abatido sobre más de 70 poblaciones con desigual resultado. El peor de todos, las personas arrastradas por el agua causándoles la muerte.
¡FELIZ DÍA DE LA CONSTITUCIÓN!
Recibe mi saludo, mis
¡¡¡BUENOS DÍAS!!!
6.22.2024.Viernes. (C. 2.082)
P. Alfonso Herrera. Carmelita.
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