sábado, 21 de diciembre de 2019

El Festival Navideño


ESTAMPA CAUDETANA.
EL FESTIVAL NAVIDEÑO.
Los estaba esperando en la parroquia de Santa Catalina con las puertas abiertas para que, al  llegar los chicos del colegio amor de Dios pudieran entrar sin demora a montar el FESTIVAL DE NAVIDAD porque, la parroquia es ancha y grande donde podrían acomodarse papás y abuelicos y tiene muy buena acústica y, para que sin estrecheces pudieran moverse a sus anchas por el ámplio espacio del templo de modo que el FESTIVAL resultara una maravilla, colofón pintiparado para una fiesta con candor especial, lárgamente preparado en las clases  del  colegio de Las Hermanas del Amor de Dios.
Las ventanas de las calles viejas, de aquellas que encerraran hace mucho tiempo a toda la Real Villa de Caudete, chirriaban, al abrirse, quejándose por el «reuma» del tiempo y es que ya sabían, lo habían anunciado, que angelitos todo blancos y con alicas iban a parar por sus calles para allegarse a la parroquia. La hora se acercaba y el murmullo no se oía, tampoco se apercibían los niños vestiditos de pastores ni el grupito de músicos del colegio hacían sonar los instrumentos musicales.
La culpa la tuvo el tiempo. Amaneció encapotado el cielo de la Real Villa y, a punto de ponerse en marcha la comitiva púsose a llorar de contento el cielo y, su contento, tornó en impedimento para el viaje por las calles de la vieja villa y, como la mañana, aguado  quedose el  proyecto.
Ya lo habían dicho con antelación al evento: «Tendrá lugar en Santa Catalina si la lluvia no hacía acto de presencia», y llovió, pero no se aguó el FESTIVAL pues se celebró en el centro escolar.
Las viejas ventanas de la vieja villa volvieron a chirriar al cerrarse, pero esta vez mucho más quejumbrosas y tristes. Pareciera que lloraban porque las gentes que viven dentro de ellas no pudieron asistir al espectáculo de ver a lo más lindo, lo más bonito, lo más hermoso, lo más valioso del pueblo engalanados para las distintas representaciones de su FESTIVAL DE NAVIDAD.
Otra vez será...
No, no subieron los niños a la parroquia donde yo les estaba esperando, pero yo sí que bajé hasta el colegio para disfrutar con la actuación de los «ñacos».
Llegué cuando los nenes de 1° y 2° de Primaria estaban, en fila india, a la espera de que la presentadora les llamara para actuar. Cuando eso ocurrió fueron entrando de uno en uno coronados con guirnaldas de papelines de color oro y con el mismo elemento se habían puesto pulseras en sus muñecas. ¡Con qué gracia movían sus cuerpecitos cumpliendo los movimientos exigidos por la coreografía marcada por la actuación el conjunto musical del colegio a las órdenes del profesor de música que tocaba con ellos. Las mamás, algún papá y muchos abuelos abarrotaban la sala.
Cuando hicieron aparición en la sala y, mientras ocupaban su lugar los niños y durante su actuación, tenías que haber visto las caras de papás y abuelicos, por las que resbalaban lagrimillas  y discurrían finos hilitos de salivas que nacían en las comisuras de sus bocas.
¡No era para menos!

En el vestíbulo, un árbol de Navidad muy original
que realizaron los alumnos de la ESO, según idea y bajo la dirección del profesor de Plástica y Pretecnología, Don Antonio Conejero. Colgaba desde el techo y, bajo el mismo, el Misterio de la Navidad. Para su construcción se sirvieron de materiales de desecho, de palets. Los niños de la etapa inferior confeccionaron los adornos y monigotes que representaban a los distintos personajes que integran  un nacimiento.

Cuando impresioné la foto ya habían «expoliado» el árbol. Habían entrado a saco los artistas pequeñicos recogiendo las figuritas que habían confeccionado o los adornos traídos de casa para, me dijo un niño, colocarlos en el nacimiento que tenía montadico en casa.
La Hermana Magdalena me dijo;
«Tenías que haber visto el árbol antes porque, la verdad, era una preciosidad».

Cuando salía de la fiesta del colegio del Amor de Dios, coincidí con las gentes que hacían lo mismo del vecino colegio público Alcázar y Serrano donde habían asistido a la representación de Navidad.

¡Me lo perdí!

Recibe mi saludo, mis

          ¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
21.12.2019. Sábado.
P. Alfonso Herrera Serrano, Carmelita

7 comentarios:

  1. Una explosión de gracia y ternura de nenes y abuelos disfrutando juntos en la sintonia de la fiesta más entrañable de todo el año.
    Fiestas que quedan para siempre en el corazón de pequeños y grandes.
    Un sábado maravilloso para ti, Padre.

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  2. Gracias especialmente por traer a casa cada día mi querido Caudete.
    Celebro cada momento de sus actividades y Vida.
    Gracias por ésta oportunidad matutina de disfrutar de él.

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  3. Buen trabajo el de las hermanas del Amor de Dios. Excelente.

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  4. Gracias por las fotos y el vídeo que tan fielmente recoge el ambiente festivo.

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  5. Que bonita la Navidad para los peques . Que pena que no pudieran subir a la parroquia . pero ellos lo disfrutan muy bien sea en la parroquia o en su colé lo importante es poder realizar lo que tenían preparado y con tanta ilusión . Buen viernes para todos .

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  6. Muy buenas tardes, P. Alfonso, que alegría todos los peques del Amor de Dios, cantado y pasándoselo tan bien, Si que es una lástima de poder celebrarlo en Santa Catalina, pero ellos disfrutan donde esa lo bueno es que se dejen de hacer los actos referente a la Navidad. Que termine bien el día.

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