ESTAMPA CAUDETANA.
UNA VISTA DE LA VILLA.
El silencio lo envolvía todo. Diríase que la Real Villa de Caudete había
desconectado, que se había apagado. No se veía un alma. Eran las 4 de la tarde
de ayer domingo. Me había dicho Paco Molinero que quería verme y bajé al garaje
para abrir el portón. Lo abrí y, mientras esperaba su llegada montado en su
coche que grita más y más alto que un cantaor de cualquiera de los palos del
flamenco, disfruté, sí, DISFRUTÉ, con mayúsculas, contemplando un trozo de la
plaza enmarcado por la fachada de la iglesia del convento de San José (El
Carmen) y de los edificios entre los que baja y sube la calle El Molino.
En mitad de la instantánea, ELLA, la fuente que ocupa en centro neurálgico de
la plaza del Carmen.
La Real Villa tiene preciosas estampas que encierran lugares emblemáticos, muy
dignos de verse de los que nos hablaba, sirviéndose del lenguaje de una buena
máquina de fotografiar, con frecuencia, el difunto Manuel Serrano Ballester, y,
entre todas ellas, ayer me llamó poderosamente la atención la fuente de la plaza
contemplada desde la puerta que da acceso a nuestro garaje.
A aquella hora, mientras esperaba a Paco Molinero que, gentilmente, se prestó a
hacerme un favor impagado, porque no hubo forma de hacerlo, solos ELLA Y
YO. Nadie distraía mi atención, solo ella se me mostraba guapa, quietecica.
El ruidico que hacían los chorros de agua al caer, haciéndole añicos, sobre el
espejo del agua del estanque, bajaba calle abajo y llegaba nítido, hasta mí,
hablándome de frescor, en medio de una tarde joven caldeada por un sol
solitario que andaba bajándose del cénit a donde se había subido, no mucho
antes. Ninguna nube se interponía entre la fuente y el sol pues, el cielo,
estaba limpio como la patena, ni los vencejos iban de un lado a otro partiendo
el aire pesado de la tarde con sus cuerpecillos aerodinámicos. Nada. Nada se
interponía entre la fuente de la Plaza del Carmen y yo.
Sí, en una tarde de otoño, que más parecía de verano caudetano suave, parado en
mitad de la calle, por la que no bajaba ningún vehículo, estuve
disfrutando con la visión de una estampa, linda, guapa, de la Real
Villa de Caudete en la que no había reparado, cosa rara, ya ves, en todo el
tiempo que llevo, como un caudetano más, viviendo en el pueblo. Pero con la
llegada de Paco Molinero en su coche chillón, se me vino abajo el
ensimismamiento en que flotaba, dejándome en la dura realidad.
Espero que la estampa de la Villa que te lleva hoy mi saludo, te guste, por lo
menos, como me gustó a mí.
¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
19.10.2020. Lunes. (C.1055)
P. Alfonso Herrera Serrano, Carmelita.
Buenos días P. Alfonso. Ayer domingo hizo un día muy bueno de sol y usted pudo sacar esa fotografía de la Plaza del Carmen . Desde luego se mire desde donde se mire la plaza siempre luce guapa. Que tenga un buen lunes.
ResponderEliminarMuy buenos días,P. Alfonso, sí está bonita la foto con la que hoy nos saluda , para usted cualquier momento de espera es bueno para fijar su teléfono y extraer una bonita imagen la Plaza del CARMEN , está guapa de cualquier punto que se mire.Que tenga buen inicio de semana.
ResponderEliminarBuena reseña de la plaza del Carmen ,con su fuente incluida por supuesto,bonita si señor y para un buen observador como usted no se le podía "escapar".Que grato recuerdo nos dejó nuestro amigo y vecino Manolo,a través de sus fotografías fue calando en nuestras vivencias y lo recordamos en los distintos sitios que asiduamente captaba con su teléfono(que el decía que era de los sencillos).Sabia con su espíritu de artista captar el momento de luz idóneo,tenía una sensibilidad especial.Que tenga un buen lunes P.Alfonso.
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