viernes, 5 de marzo de 2021

La Sequía

ESTAMPA CAUDETANA.
LA SEQUÍA.


La información de esos artilugios que ha inventado el hombre para que le ayude en sus quehaceres o como avisos a tener en cuenta a la hora de hacer programaciones o proyectos, el teléfono móvil, que, además de posibilitar el poder comunicarnos con los que están lejos, nos sirve para un montón de cosas. Una de ellas es allegar información del tiempo que nos va a acompañar, por lo menos, con una semana de antelación.
Pues, bien, llevan los móviles anunciándonos lluvia  todos los días, ya sea de mañana, ya sea por la tarde o a una hora concreta del día. ¿La has visto tú? Pues nosotros tampoco.
No, no están muy finos, esos aparatitos, cuando se trata de predecir la lluvia y el tiempo, en general,  para esta zona del mapa de España.
Aquí, en la Real Villa de Caudete, no acontece como en mi pueblo, al otro lado de la Autonomía. Allí, cuando por "Ciscarros", por el Oeste, viene oscuro, agua tenemos. Aquí cuando viene de poniente, dice Quico "Miserias", ni gota cae y si viene de levante o del sur, tampoco cae una gota.
Mi compañero, el P. Ángel, que es un socarrón de campeonato, dice que la razón por la que en Caudete no caiga ni gota de agua se debe a que a la entrada del predio caudetano hay unos carteles para apercibir, para advertir, a las nubes de que en Caudete ¡¡¡ESTÁ PROHIBIDO LLOVER!!! y, claro, las nubes, cuando ven el cartelón, pasan de largo a no ser que venga alguna cegata, sin gafas y, entonces, hacen que corran las ramblas, incluso causando mucho daño.
Y que lleva mucho tiempo sin llover me lo estaban gritando silenciosa y agonizantemente, los Narcisos , los grandes y los pequeñitos. Andaba yo abonando los árboles ayer por la mañana y me lo dijeron:"¡tenemos sed!"-"¡tenemos sed!" ¡Eh! ¡Que tenemos sed!
Me acerqué hasta ellos y, pobrecicos,  estaban en las últimas. Con sus corolicas, todo tristes, hundidas, humilladas con sus petalicos tocando el suelo tal y como las ves en las fotografías que ilustran este escrito.
No puedo explicártelo, me es imposible describirte el gozo, la alegría, que experimentaron los Narcisos cuando, el agua que les eché en los alcorquicos, empapó la tierra y llegó a sus raíces. El ansia de vivir, tiró de hojas y de pedúnculos con sus flores y los levantó volviendo a mostrar, una vez más, la magnificencia de sus flores igualitas a como las viste el otro día. Y la foresta del corralón del convento de San José (El Carmen) que venía asistiendo, con tristeza, a los últimos momentos, a la agonía, de los guaperas, de los rubitos Narcisicos, al ver su recuperación, prorrumpieron en un choquetear las hojas o de ramas, los que no han movido todavía, animándoles a seguir adelante.
¡Qué buena es el agua!
¡¡¡HACE MILAGROS!!!

Recibe mi saludo, mis

      ¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
5.3.2021. Viernes. (C. 1.192)

P. Alfonso Herrera Serrano, Carmelita.

1 comentario:

  1. Muy buenos días, P. Alfonso, ¡Hay Va!!! Cuándo he visto los Narcisos en las fotos creía que eran los de mi patio , ayer tarde estaban igual , igual pero ya veo que nos hemos descuidado en regarlos esperando la lluvia, pero hay un refrán que siempre decía mi abuela , que el agua del Cielo no quita riego. Que tenga un buen día.

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