La Alegoría

ESTAMPA CAUDETANA.
LA ALEGORÍA.

- Ayer celebrábamos la Pascua, la Pascua del Señor que, como te decía el día anterior, consiste en pasar de la muerte a la vida. Hemos asistido durante la semana pasada, la Semana Santa, a la celebración de los misterios principales de la Religión Cristiana. De la mano de la liturgia hemos celebrado los últimos momentos de la vida de Jesús que concluyeron en lo alto de la Cruz y en el día de ayer rememoramos los primeros momentos, contándolos en nuestro tiempo, no en el de el de Jesús, como Dios, ni como Hombre porque al surgir de la muerte, ya Resucitado, en ese estadio, tampoco está sometido al imperio del tiempo.
La pandemia nos ha privado un año más de hacer ostentación de la fe y de la piedad por las calles de las ciudades y de los pueblos de España, también por las calles de la Real Villa de Caudete, mediante la celebración de procesiones. Pero ello no has sido óbice para que la inventiva de la gente haya encontrado el modo y la manera de, sin saltarse la prohibición, llamar la atención   sirviéndose de elementos muy característicos y concretos tomados del medio religioso  y, de paso, hacer propaganda de los productos que se ofrecen para el consumo de la población. Y, así, tenemos que el escaparate del HORNO de TERE, sito en la Avda. de la Virgen, frente al mercado, esquina a la calle Horno es todo él un claro ejemplo de ello.
Su escaparate es toda una ALEGORÍA.
Tiene el escaparate tres alturas, la parte de abajo, es toda ella una estampa que rememora, con sus cofrades tocados con sus hábitos y  sus capiruchos y damas de rigurosa vestimenta negra,  las celebraciones procesionales de los pasos en La Semana Santa. Las estanterías superiores, tanto la central como la de la parte alta, nos están metiendo de lleno en La Pascua con sus huevos de colorines, de Pascua, y hasta con una hermosa gallina de la que se comerá hasta sus plumas, seguramente de chocolate.
Las figuritas de nazarenos y damas, los huevos de colorines y hasta la gallina no son otra cosa que los "anzuelos" para llamar la atención del viandante, a mí me la llamó, para que bien, directamente, bien, subliminalmente, la gente "pique" en los productos de panadería y bollería hábilmente situados en torno a los símbolos religiosos o costumbristas.
Ciertamente, el Horno de Tere sabe sacarle rendimiento a su estrecho escaparate de tres pisos. Claro que, la mejor propaganda que lleva a cabo Tere  no es otra que la calidad suprema de sus productos, que se promocionan por sí solos, y por el boca a boca.

Recibe mi saludo, mis

      ¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
5.4.2021. Lunes.  (C. 1.222)

P. Alfonso Herrera Serrano, Carmelita.