ESTAMPA CAUDETANA.
EL NIÑO DE LA BISABUELA.
En la mañana de ayer sonó el teléfono. Preguntaban por mí. Requerían mi
presencia en una de las casas de la parte alta de la Real Villa de Caudete,
aquella en las que se levantan en torno a la ermita de Santa Ana.
Una mujer, muy metidica en años, con grandes conocimientos de sí misma, esos
conocimientos que se adquieren empíricamente porque la experiencia siempre es
un grado. Siempre que me acerco hasta esa casa, me habla ella de sus huesos que
la traen por la calle de la amargura pero que, a pesar de ello, no la impiden
encontrarse con Dios con el que conversa constantemente, no tanto para que le
prive de sus dolores, cuanto para presentarle, en sus oraciones, a otras
personas. Ella maneja los dolores con una fuerza de voluntad que le sale
desde aquel fondo, desde aquella generación, la suya, de casi un siglo atrás,
que se caracterizó por el temple y la dureza, semejante al pedernal y, si éste,
era empleado para incrustarle en los trillos que fabricaban en Cantalejo
(Segovia) para sacar el cereal de sus espigas, aquel, sirvió para roturar una
abrupta etapa de nuestra Historia como fue la que nos trajo la primera mitad
del siglo pasado.
Ya me despedía de la buena mujer cuando me pidió que viera una imagencica
del NIÑO que se encontraba entronizada en el centro de la consola de su alcoba,
llenita de muchas otras imagencicas.
No la esculpió Roque López, porque ésta es de barro, pero muy bien hubiera
podido haberlo hecho porque, me dice la buena mujer: "perteneció a mi
bisabuela y mi abuela le hizo el vestidico que lleva puesto.
Al esconderle, para que no fuera destruido, durante los avatares de la guerra
civil, perdió la manica y yo se la reconstruí. Y me pidió que se lo bendijera
porque no recordaba que se la hubieran bendecido anteriormente".
Lo hice y, tras hacerlo, la dejé en su casica.
Mientras salía por la puerta alcancé a oír la sintonía de Radio María, su gran
compañera para sus ratos de oración pues, me había dicho, que rezaba el primero
de los cinco rosarios diarios a las tres de la madrugada pues, a esa hora salen
a las ondas por las antenas de Radio María los saludos del Ángel, las Ave
Marías, que conforman la primera de las oraciones ofrecidas a la Virgen María,
el Santo Rosario.
Recibe mi saludo, mis
¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
6.4.2021. Martes. (C. 1.223)
P. Alfonso Herrera Serrano, Carmelita.
Muy buenos días , P. Alfonso, está imagen que hoy nos presenta del Niño , tan bien conservada ya tiene sus buenos añitos , que siga así su conservación los próximos herederos, pues es una joya , aunque el material empleado no sea de primera calidad , pero ahí sigue manteniendose , gracias a las manos que lo cuidan con gran esmero. Que tenga un buen día.
ResponderEliminar