jueves, 15 de julio de 2021

La Virgen del Carmen en el Cuadro de San Pedro Tomás. Día 8º de la Novena

 ESTAMPA CAUDETANA.

LA VIRGEN DEL CARMEN EN EL CUADRO DE SAN PEDRO TOMÁS.

DÍA 8° DE LA NOVENA.
Otro de los frescos que pintó Remigio Soler en la pared de la nave derecha de la iglesia del convento de San José hace referencia a la aparición de la Virgen Santísima, nuestra Madre del Carmen, a un fraile devotísimo de ella, San Pedro Tomás, y que fue requerido por  la Iglesia para ser Arzobispo de Creta y, luego, Patriarca de Constantinopla. Francés de origen, nacido en 1305 y fallecido el 6 de enero de 1366 en Famagusta. Fue un hombre que luchó con ahínco para que volvieran a la obediencia de Roma los hermanos orientales separados por Focio y Celulario. 
Pues, bien, el bueno de Remigio Soler, el pintor valenciano, volvió, con sus achiperres de pintor, a esta Real Villa de Caudete y dejó en el muro de la iglesia del convento, el momento en que el buen carmelita y servidor de la Iglesia Universal, en puestos de muchísima responsabilidad, era objeto de la manifestación particular de la MADRE DEL CARMELO. Firmó esta pintura al fresco siete años después de que lo hiciera con la de San Alberto de Sicilia, de la que te daba noticia ayer, en 1959.

Ayer celebramos en la iglesia del convento de San José, presidida por la imagen de la Virgen del Monte Carmelo, el día octavo de la novena que venimos haciendo para preparar la gran solemnidad de su fiesta que llevaremos a cabo en el día de mañana.

El padre predicador nos convoco para que acompañáramos a la Virgen a una boda que tuvo lugar en un pueblecito a 6 km. de Nazaret, en la cercana ciudad de Caná, en Galilea. No nos habla el evangelista Juan de que asistiera el bueno de San José el Patriarca de la familia, de la Iglesia y de la Orden del Carmen. Muy posiblemente porque ya habría dado el salto desde la Sagrada Familia que peregrinaba en la tierra a la gran Familia de los Hijos de Dios, cabe Él mismo, tras haberle cerrado los ojos el mismo Dios por la segunda persona de la Santísima Trinidad que tomó nuestro ato humano en su casa, en el claustro materno purísimo de su esposa, María. Mucha familiaridad y confianza debería existir entre la familia de los novios y la familia de Jesús de Nazaret porque, allí,  se encontraba, como invitada, María, Madre de Jesús, y, el mismo Jesús y, con Él, todos sus apóstoles. Fue, según nos dice el evangelista Juan, la ocasión pintiparada en la que Jesús se manifestó a sus apóstoles y lo hizo, no porque le hubiera llegado la hora, Jesús mismo nos dice que no era su hora todavía, sino a instancias de su madre María, y es que, amigo, ¡cuánta autoridad tienen las madres sobre los hijos! ¡cuánta autoridad tuvo María Virgen sobre Jesús, el Hijo de Dios, su propio hijo, para, sin prestar atención a la queja de su hijo, “mujer que todavía no ha llegado mi hora”. Ella, ni corta ni perezosa, se dirigió a la servidumbre y les dijo:”ahí tenéis a mi Hijo, haced lo que Él os diga”. Se vio cogido, Jesús, entre su Madre y la pared, que no “entre la espada y la pared” y, claro, tuvo que pedirle a los sirvientes que llenaran las seis tinajas que tenía el amo de la casa,  para las abluciones, con capacidad de 100 litros cada una. Un buen rato le llevaría a la servidumbre acarrear los 600 litros de agua para llenar, hasta el borde, las seis tinajas. Pero lo consiguieron. Entonces Jesús les mandó llevar algo de aquel agua que habían metido en las tinajas al mayordomo o al maestresala. Y, cuando éste probó aquel agua “se quedó de una pieza” La sorpresa que se llevó fue de las “de aquí te espero escopeta”. Se fue pitando con el vaso de agua convertida en vino por Jesús a donde se encontraba el novio y le espetó:”¿de qué vas? ¿Es que no sabes que en estas fiestas se ofrece primeramente el vino bueno, de calidad, a los invitados y, cuando todos están un poco alegres, se le da el cambiazo por uno de peor calidad”

 Concluye el evangelista su relato diciendo que, con este milagro, Jesús dio comienzo a la encomienda que trajo desde Dios Padre cuando asumió la naturaleza humana, es decir, explicitar ante sus discípulos y ante todo el mundo, el plan de salvación proyectado desde siempre, por parte de Dios, para beneficio del ser humano.

El predicador nos dijo que ese milagro de Jesús en una boda de Caná de Galilea, aquella actuación no era otra cosa que la continuación de lo que ya se vivía en la familia en Nazaret donde la vivencia del proyecto de Dios ya era una realidad.

Se vivía ya plenamente  en estado de salvación y la hora a la que se referiría Jesús, hacía alusión al comienzo de su cometido para con los seres humanos en general. De donde, el milagro de la conversión del agua en vino, no era otra cosa, además de avivar la alegría en la celebración de una boda: «vinum letificat cor hominis» (Salmo 103,15) (el vino alegra el corazón del hombre), que el símbolo de un cambio en profundidad que le llegaba al ser humano en la Persona de Jesús. Con aquel milagro se salvó la fiesta y con la llegada de Jesús al mundo, llegó, también, la salvación para la humanidad.
Y ¿quién la «adelantó»? Pues, ni más ni menos, que la Virgen María, la Madre del Señor, a la que no se le escapaba detalle, por medio de otro milagro grande y preclaro, nos decía el P. Joaquín, EL MILAGRO DE LA INTERCESIÓN.
De ahí pasó el orador sagrado a asegurar que la Virgen ha venido haciéndolo así a lo largo de la Historia de la Salvación y lo sigue haciendo ahora, en nuestro tiempo cuando se manifiesta aquí, allá y acullá, para lo que puso, como ejemplo, las constantes apariciones que viene haciendo desde el 24 de junio de 1981 en Medjugorje. A donde ha peregrinado él en múltiples ocasiones, Y, en ello está, porque es un fervoroso devoto de la Virgen, bajo esta advocación.

Sí, ¡qué poder más grande tienen las madres sobre sus hijos!

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      ¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
15.7.2021. Jueves. (C.1.301)

Hoy es ya la víspera de la Solemnidad de la VIRGEN MARÍA DEL MONTE CARMELO. Por mor de la pandemia de las narices, no redoblarán las campanas ni tendremos el canto de la Salve ni del Flor del Carmelo a las 0,00 horas, junto a un numeroso grupo de devotos hijos, que viene abriendo el día de la fiesta de la VIRGEN DEL CARMEN, como ya es tradición. Pero, eso sí, a las 13 horas, las campanas de la torre de la iglesia del convento manifestarán su contento volteando sobre sí mismas dando noticia de que, mañana, es FIESTA GRANDE, porque la Comunidad de PP. Carmelitas del convento de San José y en toda la Real Villa de Caudete honraremos la memoria de LA VIRGEN DEL MONTE CARMELO en su MEMORIA SOLEMNE.

P. Alfonso Herrera Serrano. Carmelita

1 comentario:

  1. Muy buenas tardes, P. Alfonso , otro día más nos presenta otro fresco más de las imágenes de la Virgen del Carmen hoy con San Pedro Tomás, todos los cuadros son preciosos y la Virgen del Monte Carmelo en todos ellos muy guapa. Buena catequesis que ayer explicó el P Joaquín cómo el HIJO siendo DIOS obedece a su MADRE, pediremos a Virgen que en nuestras peticiones ruegue a su Hijo por nosotros . Que termine bien el día.

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