El Cuadro Vivo.

ESTAMPA CAUDETANA.

EL CUADRO VIVO.

Ya lo sabes. No hace falta que te recuerde que toda la Real Villa de Caudete viene a ser, durante todo un mes, como una especie de gran museo donde cuelgan obras maravillosas de pintores cultivadores del arte de la acuarela y, es que no podía ser de otra manera por ser la cuna del renombrado, mundialmente, maestro de este arte, Rafael REQUENA. En calles y plazas podemos ver muestras a cual más bonita que convergen en dos puntos señeros de la Villa, la sala Pérezgil de la casa de la cultura y el claustro Barroco-Toscano del convento de San José, mi casa, en el que, cada tarde, veo cómo gentes del lugar y otros venidos de fuera pasan para contemplar las obras de pintores escogidos del gran país oriental y mistérico de la India.

 El cuadro que no ven colgado en los paños impolutos del claustro es el que titulamos P. Ángel porque, el P. Ángel, fresco como una rosa, anda pausadamente por las calles del pueblo y, a pesar de que todo el mundo es a besarle y abrazarle, no le han ajado, está lindo y liso como el cutis de una monja de clausura ya que no usa otro afeite que jabón rico en ph y agua fresca del grifo. 

Y, aconteció el domingo pasado, día en que las actividades de la VI Bienal de la Acuarela pivotaba en el ámbito claustral del convento, que el P. Ángel, al volver de celebrar su misa en el monasterio de las Madres Carmelitas, se dio de bruces con el acuarelista peruano, José Miguel Collantes de Paz, 

(El P. Ángel con el acuarelista que le pintó y le regaló la obra)

que ya fue comisario de la exposición de los pintores de su país cuando éste fue país invitado, tiró de libreta y, en un pis-pas, abstrajo su faz al P. Ángel y se la devolvió trazada en el blanco del papel de una de las páginas de aquel cuaderno. La ves en la fotografía que abre estas letricas.

¿Tú has visto a ñaco con zapatillas nuevas? Pues, mismamente como el niño subió el P. Ángel al claustro alto del convento con su "cara" en las manos enseñándonosla, todo contento.

El próximo día 27 levantarán vuelo las obras expuestas en las remozadas paredes del vetusto convento de San José, conocido como El Carmen, pero quien permanecerá, como CUADRO VIVO, por entre los muros conventuales será el P. Ángel y, en una de las paredes de su habitación, se mirará, a sí mismo, con los ojos de aquella copia que le hiciera el acuarelista peruano asentado en Illescas, Toledo, José Miguel Collantes de Paz.

Recibe mi saludo, mis

   ¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!

4.11.2022. Viernes. (C. 1.601)

P. Alfonso Herrera. Carmelita.