La bienvenida.

ESTAMPA CAUDETANA.

LA BIENVENIDA.

La vi hoy cuando fui a poner un poco de humedad en el secarral de algunas jardineras que lucen, al día de hoy, tipo y brillo en los alféizares de las ventanas del claustro alto de este convento de San José. No la había visto el día anterior, el día de mi vuelta, el día en que me reintegré a la comunidad, tras pasar unos días de asueto a la vera del mar. Pero, hoy, sí  que la vi en una pequeña jardinerica que comparte espacio con otra un poco más grande. Allí estaba la ESTAPELIA floreciendo. Creo que eran cuatro flores una abierta de par en par otra solo le faltaba un poquito a uno de los pétalos para estirarse y mostrarse en la hermosura que atesora esa flor y otras tratando de merecer y, tres capullos, están a punto de romper y abrirse a la luz esplendente de un otoño, muy entrado en días, y que alumbra, al presente, nuestros días, muy mermados, ciertamente, en esta zona de La Mancha Baja donde se encuentra la Real Villa de Caudete.

Así me recibió y me dio la BIENVENIDA la ESTAPELIA  a mi vuelta de las vacaciones, con ese grupito de flores, de flores propias, agradabilísimas a la vista pero pestilentes, en grado sumo, al olfato humano, aunque, no así, para los insectos, a los que emplea como polinizadores, que van, como lobos, atraídos por ese fuerte olor a carne podrida, principalmente para las moscas que vuelan, todavía, en un aire, templado.

Recibe mi saludo, mis

¡¡¡BUENOS DÍAS!!!

28.10.2023. Sábado. (C. 1.710)

P. Alfonso Herrera. Carmelita.