VOLVIÓ POR SUS FUEROS
(Sagrada imagen de la Virgen del Rosario)
(El Sr. Obispo inciensa a la sagrada imagen de la Virgen del Rosario
Arranca la procesión)
Habían pasado sesenta años desde la última vez en que
procesionara la preciosa imagen de la Virgen del Rosario, imagen que vino a
ocupar el lugar de aquella otra que fue reducida a cenizas en tiempos pasados
por medio de actuaciones humanas que fueron encerradas, para siempre, en el
estuche del olvido.
Ya te decía ayer que, por los años sesenta del siglo pasado,
dejaron de pasear por las calles de la Real Villa de Caudete a la imagen de la
Virgen del Rosario en lo que dieron en llamar la tercera de sus procesiones que
tenía lugar el día de su fiesta, el 7 de octubre. La segunda se realizaba en la
tarde del mismo día de Resurrección del Señor y la primera, se hacía por la
mañana del día de la Resurrección, a la conclusión de la misa Mayor, procesión
que sigue llevándose a cabo, al día de hoy, y que es denominada como la de El
Encuentro en la que la piedad popular recrea en esa luminosa mañana, el
reencuentro entre Jesús, el Hijo de Dios resucitado por la fuerza de su
Espíritu, con su Madre. No no los lo trae, no nos da noticia el Evangelio
acerca de este encuentro de Jesús Resucitado con su Madre aunque, para mí
tengo, y el pueblo creyente de esta Villa de Caudete, así lo lleva a la
práctica, que el primero de los encuentros que tuvo el Resucitado fue,
precisamente, con aquella, su Madre, que no le faltó en ningún momento y que
siempre, siempre, abrigó la esperanza, surgida de una fe total en la Palabra de
Dios, de que resucitaría al tercer día.
Luego, ha al amanecer, nos relatan los evangelios, se
sucederían las manifestaciones a sus discípulos hundidos por la pena y
temerosos de que llevaran a cabo, con ellos, el mismo castigo, la misma muerte,
que habían dado a su Maestro.
Sí, el sábado tuvo lugar el singular y magno acontecimiento
de la celebración del 75 aniversario de la consagración de la nueva imagen de
la Virgen del Rosario con la presencia del Señor obispo de la Diócesis Don
Ángel Fernández Collado, que tuvo a bien venir a presidir las pompas
litúrgicas, la Eucaristía en la fiesta a Ella, a la Virgen del Rosario
dedicada.
Una vez concluida la ceremonia litúrgica, el párroco y su coadjutor,
ambos naturales de esta Real Villa de Caudete, acompañaron a la sagrada imagen
junto a multitud de cofrades y de devotos, en el paso de la Virgen por las
calles de la parte antigua llegándose, incluso, hasta las puertas del
monasterio donde un puñado de hijas ofrecen su vida en holocausto, en oración a
Dios, por sus hermanos los habitantes de la Villa.
Después de escuchar el saludo, hecho canción, que le dirigieron sus hijas, las Madres Carmelitas de clausura, reemprendieron el camino que les conduciría, por la Avenida de la Virgen de Gracia, hasta la Lonja por la que entró en la plaza de la iglesia concluyendo, su paseo, aclamada en todo momento por sus fieles hijos caudetanos, al entrar por las puertas de la parroquia de Santa Catalina donde Ella es venerada en la capilla que le está dedicada en la nave lateral de la izquierda del templo.
(Llegando al monasterio de las Madres Carmelitas)
(Distintos momentos de la procesión)
Recibe mi saludo, mis
¡¡¡BUENOS DÍAS!!!
9.10.2023. Lunes. (1.694)
P. Alfonso Herrera. Carmelita.
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