La Imagen de la Virgen de la Amargura de San Francisco.

ESTAMPA CAUDETANA 

LA  IMAGEN DE LA VIRGEN DE LA AMARGURA DE SAN FRANCISCO.

Hacía quince días que no bajaba hasta la parroquia de San Francisco porque, debido a la nueva distribución de quehaceres pastorales en los lugares de culto, en la Real Villa de Caudete, tras la incorporación al equipo sacerdotal, del P. Antonio Graciá Albero, carmelita, natural de esta Villa, vamos rotando,  razón por la que no había encontrado a la Sagrada Imagen de la VIRGEN DE LA AMARGURA con el atuendo totalmente cambiado.

Ya te hablé, con anterioridad, de que, con la llegada del tiempo litúrgico de Cuaresma, se habían dado, en el Santuario de los Patrones y en la parroquia de Santa Catalina, los preparativos para resaltar el tiempo en que íbamos a entrar y, así, era de capital importancia situar la imagen del Cristo doliente en lugar idóneo para concitar la atención de los fieles y tanto en el santuario como en la parroquia de Santa Catalina, la mayordomía y cofradía de la Virgen de Gracia, por un lado, y los cofrades del Cristo de la Agonía de la parroquia de Santa Catalina, por el otro, colocaron las hermosas imágenes del Cristo de la Agonía en lugares preferentes en los presbiterios de sendas iglesias.

Ayer, cuando llegué, a la parroquia de San Francisco para cumplir con la encomienda ministerial, mis ojos se posaron en la imagen doliente de la VIRGEN DE LA AMARGURA a los pies de su hijo, el Cristo de la Juventud, con el que procesiona por las calles de la Real Villa de Caudete en la Semana Santa. Las camareras cofrades del Cristo de la Juventud se preocuparon, como en tantas otras ocasiones, de vestir a la Sagrada Imagen con el manto de penitencia, un manto de color morado, que es el característico del tiempo litúrgico de la Cuaresma.

Recibe mi saludo, mis

¡¡¡ BUENOS DÍAS!!!

20.2.2024. Martes. (C. 1.811)