ESTAMPA CAUDETANA.
SEGUNDO DÍA DE LA NOVENA EN HONOR DE LA VIRGEN DE GRACIA PATRONA DE LA REAL VILLA DE CAUDETE.
Ya estaba yo en ello por eso cuando terminé de cerrar el Manifiesto en la iglesia del monasterio de las Madres Carmelitas de clausura, en lugar de volverme a casa huyendo del calor tan subido de tono con el que nos estaba agasajando el día, decidí bajar hasta la Glorieta de la Cruz con el fin de esperar allí.
Eran las dieciocho horas y diez minutos cuando emprendí el camino de bajada hasta la Glorieta de la Cruz.
No se veía un alma. Con nadie me crucé. Solo un mozalbete que llevaba una mochila a la espalda, mostrando la pujanza de la juventud, me sobrepasó y me dejó atrás, de modo y manera que, al poco rato, se me perdió en lontananza.
Mientras me iba acercando hacia la Glorieta de la Cruz, desgranaba las cuentas del Santo Rosario que concluía, ya dentro del corralico donde se levanta el monumento a la Cruz y, debajo de ella, a la Virgen María de Gracia esculpida en piedra, de la que tantas veces te he hablado.
No tomé asiento en el banco en el que suelo hacerlo siempre que bajo hasta ese lugar tan recoleto y recogido donde la reflexión fluye sin dificultad alguna porque no suele entrar la gente y la que lo hace, simplemente saludan a la Madre del Señor representada en la esculturica pétrea y vuelven a marcharse.
No, no me senté en el banco de costumbre porque, a esa hora, había sido copado íntegramente por los rayos que lanzaba el sol desde lo alto mientras caminaba, sin mucha prisa, hacia mi pueblo de Oropesa y, luego, a Portugal desde donde se iba a embarcar para atravesar el Océano Atlántico porque, al llegar al continente americano, tenía que plantar por allí, el día, dejándonos a nosotros encerradicos en la noche.
Fueron 40 minutos de espera. La manecilla larga del reloj acababa de pasar por todo lo alto de la esfera, mientras la pequeñica se encontraba anclada en el número 7, el de las diecinueve horas, cuando, desde lo lejos, llegaron hasta mis oídos las alegres notas de una banda de música.
"Ya vienen", dije para mí mismo, ya está llegando la comitiva formada por la comparsa de los Mirenos que es a la que corresponde convocar y animar a la feligresía al rezo del SEGUNDO DÍA DE LA NOVENA EN HONOR DE LA VIRGEN MARÍA DE GRACIA, PATRONA DE LA REAL VILLA DE CAUDETE.
Iban de paseo sin prisas porque desde la glorieta de la Cruz hasta el Santuario de la Virgen de Gracia no le restaba mucho y así daban tiempo para llegar a las 19:30 horas que es cuando da comienzo el rezo del Santo Rosario, previo a la novena y a la misa que la sigue.
Como acontece siempre, al frente de la comitiva de la comparsa de los Mirenos, iban las dos volanticos, seguidas por los patrones de la comparsa, la reina y sus damas de honor y la autoridad del grupo, a los que seguían una banda de música y cerraba la comitiva una gran multitud de miembros, grandes y pequeños, que componen la vistosa comparsa de los Mirenos, tal y como ves en el vídeo que te adjunto
Recibe mi saludo, mis
¡¡¡BUENOS DÍAS!!!
5.8.2024.Lunes. (C. 1.974)
P. Alfonso Herrera. Carmelita.
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