Al Convento de San José (El Carmen) lo vistieron de Fiesta.

ESTAMPA CAUDETANA.

AL CONVENTO DE SAN JOSÉ  (EL CARMEN) LO VISTIERON DE FIESTA.

Sí, claro que sí, y lo vistieron así, DE FIESTA No podía ser de otra manera, ni nadie que lo hiciera mejor, que los ñacos de la Real Villa Caudetana y, más concretamente aquellos que vienen aprendiendo a bailar en la escuelica que lleva adelante un grupito de personas animosas que no pretenden otra cosa que salvaguardar lo propio del lugar, lo que recibieron de quienes les precedieron y, entre otras riquezas, LOS BAILES EN HONOR DEL DULCE NOMBRE DE JESÚS.  Y, de esta manera, encauzar esa riqueza genética que reciben las gentes CAUDETANAS cuando ponen su piececico en este mundo, porque, has de saber que, aquí, todos los niños nacen bailando y no es raro porque, ya, mientras están siendo gestados, sus madres, ya los van encaminando, enseñando al practicarlos ellas mismas durante su estando de gravidez.

Y, sí, mediada la mañana del día de ayer, el convento de San José (El Carmen) recibió, en su claustro bajo, el barroco-toscano, a lo más lindo, al tesoro, con que cuenta la Real Villa, LOS ÑACOS, ellos y ellas, para pasar un rato agradabilísimo y para hacerlo pasar a quienes les acompañaban BAILANDO A LOS SONES de las melodías que se bailan en LAS NAVIDADES  en honor del DIVINO INFANTICO. Bailes que han venido aprendiendo en esa escuelita mencionada donde entusiastas y avezados bailadores les vienen enseñando.

Hasta que todo se puso en marcha por los organizadores, que no eran otros que sus maestros, los niños posaron y posaron para dejar constancia del acontecimiento, sus imágenes ataviados con el hato propio del lugar para tal efemérides para la pisteridad. Y, así, los veíamos luciendo sus preciosos mantones de Manila que venían a ensalzar su candor personal.

Me dirigí a una Madre que estaba fotografiando a sus hijas y le pregunté:

"¿Me permites que las fotografíe y que las publique en la Web de Amigos de la Historia Caudetana?"

Y, ella, en la que no cabía más gozo, porque estaba, de él, llena, me dijo:.

"Pues, claro. Claro que sí".

Y ahí arribita, ilustrando estás letricas, están, así de guapetonas, las niñas.

Cuando la música ya estaba saliendo por los bafles se formó la comitiva de pareja y , sin nada que envidiar a las parejas de mayores que bailarán en las próxima Navidad, se encaminaron al centro del claustro para formar un círculo en torno a la fuente allí existente para disfrutar, enseñándonos, lo bien que se mueven, lo bien que bailan las baladas, los pasodobles y otros sones.

Este año acompañó el tiempo, no llovió, ni siquiera "a lo bonito" que dicen aquí cuando lo hace suave y pausado y que, por el norte, llaman orbajear o chirimiri y, en otros lugares, calabobos. Nada, ni una gota. Todo acompañaba para que, todo, les saliera a pedir de boca, de primera. Y, así aconteció.

Fue salir la primera nota musical por el altavoz y todos los ñacos, como si hubieran recibido un calambrazo, comenzaron a danzar y, ¡madre mía! ¡Cómo lo hacían! Con decirte que, a mí, me pareció ver a las columnas barroco-toscana del claustro saltar de sus pedestales para ponerse a bailar con ellos. Oye, ¡que no es cuento!, que me lo parecía de verdad. Y di en pensar:

"se nos viene abajo el claustro alto porque van a implosionar los arcos de medio punto que sostiene la columnata".

Menos mal que solo fue mi impresión, y, el "milagro" del derrumbe, no sé produjo. Pero a punto estuvo, no vayas a creer.

Del gran acontecimiento que tuvo lugar en la mañana de ayer en el claustro barroco-toscano del convento de San José (El Carmen), dejo constancia en los vídeos que grabé desde el claustro alto y que pongo a disposición del director de la Web Amigos de la Historia Caudetana, Don Antonio Conejero Rodríguez para si lo crees oportuno os los dé a conocer.

Recibe mi saludo, mis

¡¡¡BUENOS DÍAS!!!

14.12.2025. Domingo. (C. 2.418)

P. Alfonso Herrera. Carmelita.

P. D. Ayer, por la tarde, tuvo lugar el encendido de las luces en toda la Villa. Mañana te lo cuento.