Cosas del P. Ángel

ESTAMPA CAUDETANA.
COSAS DEL P. ÁNGEL.

El P. Ángel no es natural de Caudete, pero como si lo fuera porque la mitad de su vida, si no más, la ha pasado aquí en la Real Villa.
Aquí llegó por primera vez para pasar el año de noviciado. Era el año de  gracia de 1952. Con él y sus compañeros se inauguró el mismo. Ya sacerdote no tardarían mucho los superiores en mandarle a esta Villa. Aquí lo fue todo, lo fue en el ámbito de la liturgia y lo fue en el mundo del trabajo. Creo que ya te he hablado alguna vez de él.
- Tenía un vespino. "Me costó 7.000 Pts. de las de entonces", me dijo. Por ir en ella por todo el pueblo me apodaron "Ángel Nieto" por aquel corredor de motos que por entonces triunfaba en los circuitos de esos países de Dios y lo hizo hasta "doce veces más una" (era muy supersticioso el malogrado deportista). En el asiento de atrás fijó una caja de madera y en ella introdujo herramientas de toda especie y, allí donde le necesitaban, paraba la Vespino y arreglaba la rotura de lo que fuera, madera, electricidad, fontanería...era "un no va plus". A estas alturas los años le han mermado sus facultades físicas. Él dice que tiene cumplidos los 99 años (mentira gorda) y muy trabajados pero, como tiene un médico de pago (mentira gorda), los lleva bien. Aunque, bien, lo que se dice bien, no lo está porque le "gritan" los pies desde
-  allí donde éstos se juntan con la acera y, a veces, se las hacen pasar un rato mal.
- Pero él tira para adelante sin mayor tropiezo pero, claro, muy lentamente. Y es que, parece que no, pero los años vienen a ser como planchas de plomo sobre los hombros, sobre todo cuando se han atropado muchos.
- Él, en realidad, solo tiene cumplidos 81 y, por cumplir..., muchos más, todos los que Dios quiera.
- Los pies no le secundan el deseo casi nunca y, así, tiene que ir despacito. Si tuviera que caminar junto a una tortuga algo de ventaja si que la sacaría, pero no creas que mucha.
-  Pero el tiempo, la edad, lo que le ha quitado por un lado, por los bajos, se lo ha dado, y con creces, por otro, en todo lo alto, en la cabeza, que, a la pobre, no la deja descansar para nada, ni un momento.
- ¡Fíjate! Estamos en tiempo de caquis y nosotros tenemos un árbol bien hermoso y, más, desde que Paco, conocido como "El nieto de Bienvenido" ha entrado en "relación" con él. Pues bien, cada año para que maduraran pronto los frutos de ese árbol, porque al no ser de esa clase que dicen, "Persimón", tienen que ser consumidos muy maduros, los "mareaba" metiéndolos en una cazuela con un vasito de coñac o los duchaba con  alcohol para que dejaran pronto su bravura y aspereza, práctica que le llevaba bastantes días.

- Hoy, no lo hace así. En ese devanarse los sesos ha venido a discurrir que colocándolos encima del aparato quemador del gasoil en el cuarto de calderas donde la temperatura es alta y constante, los caquis alcanzan, en tres días, su momento adecuado para ser consumidos, tres días.
- Así es el P. Ángel, siempre activo, con el "cacumen" siempre en actividad, nunca en descanso. Siempre descubriendo posibilidades aquí y allí.

- Recibe mi saludo, mis
-              ¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
- 12.11.2019. Martes.

P. Alfonso Herrera Serrano, Carmelita.