domingo, 24 de enero de 2021

El Arco Iris

ESTAMPA CAUDETANA.
EL ARCO IRIS.


No lo vi con mis propios ojos. Esas preciosas fotografías me las mandó Fina con el deseo de que tuviera un buen día.
Ocurrió en la mañana del viernes pasado. Por la noche dejaron caer algunas gotas unas nubes que iban de paso. El P. Ángel, mi compañero, que se encarga del pluviómetro, que él mismo situó en el corralón del convento de San José (El Carmen), nos dio a conocer después del rezo de los Laudes:" solo un litro, nada más que un litro".
Fue suficiente para hacer posible una maravilla, la descomposición de la luz, para mejor, proyectando sobre el cielo del polígono industrial de la Real Villa de Caudete, un semicírculo de colores, EL ARCO IRIS.
El sol lleva unos días, desde que nos visitó la borrasca Filomena, de mal humor. Pero el viernes andaba el bueno del astro tratando de aprovechar un boquete o cualquier resquicio para llegarse hasta la Villa caudetana con sus rayos con el fin de templarnos un poco y, oye, lo consiguió. Las nubes que durante la noche habían dejado caer unas goticas aligerando su peso, aceleraron el paso y la ristra de colegas gordotas y oscuras que las seguían cansinamente, como si fueran en procesión, habían dejado un buen trecho entre ellas. Ese fue el momento que aprovechó el sol para evaporar, con el calor de sus rayos, el agua caída durante la noche y, de paso, nos regaló algo de lo que, en él, es sustancial, calor. Pero los rayos que traen el calor también traen la luz y ésta, por su parte, se puso a jugar con las gotitas de agua que flotaban en el aire y de aquel juego inocente proyectaron sobre el cielo algo grandioso, UN DOBLE ARCO IRIS.
- Pero ese calor duró "lo que dura el pan en la mesa del pobre", que afirma el dicho, ¡nada! porque durante la sobremesa y hasta las 16,30 horas, las nubes que se habían rezagado encapotaron el cielo de la Villa y dejaron unas pocas gotas mientras pasaban de largo. El agua correspondiente a tres litros se habían introducido en el pluviómetro del P. Ángel. Total 4 litros en todo el día. Pero, eso sí, con el agua dejaron caer una humedad que, al enseñorearse por el predio caudetano, hizo desaparecer, como por ensalmo, el calorcico con que nos había obsequiado el sol por la mañana, de modo y manera que, esa humedad, se nos introducía hasta los huesos. Sí, fue una tarde fría, muy fría.
- Pero como dice el refrán: "que nos quiten lo bailao". Y es que el mero hecho de contemplar el doble anillo de ARCO IRIS que se había puesto el polígono industrial del pueblo por montera, mereció la pena que hubieran lagrimeando las nubes que pasaban raudas por la vertical del pueblo al amanecer.
- Yo pude disfrutar de su contemplación gracias a la gentileza de Fina Solera, la hija de "el Pollo", el alma que fuera del bar París que abría sus puertas a la plaza de El Carmen.


Recibe mi saludo, mis

      ¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
24.1.2021. Domingo.  (C. 1.152)

P. Alfonso Herrera Serrano, Carmelita.

1 comentario:

  1. Muy buenos días , P. Alfonso, sí , son bonitas las fotos que Fina le envío , pues gracias a ella y a usted que sabe aprovechar para mandar sus saludos de buenos días podemos disfrutar , a y también al P. Ángel por su información de el agua que nos deja las nubes.Que tenga un buen domingo día del Señor y muy airoso.

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