sábado, 20 de marzo de 2021

El Crucifijo de Papelón

ESTAMPA CAUDETANA.
EL CRUCIFIJO DE PAPELÓN.


(Cristo Crucificado existente en la ermita de Santa Ana desde los años noventa del siglo pasado. Fue donado por una familia que deseó permanecer en el anonimato)
En la década de los noventa del siglo pasado, siendo párroco en Madrid, un feligrés que había sido militar se encontraba en la reserva tras servir muchos años a la Patria  en los entonces territorios españoles del Sahara. Al concluir su misión allí, se trajo consigo, a la península," un crucifijo de alrededor de un metro y clavado en la cruz cuyo Cristo fue realizado con hojas de panojas de maíz. Se lo había regalado un árabe que  lo había hecho especialmente para él.
Un buen día se llegó hasta la parroquia con aquel recuerdo tan entrañable para regalárselo a la parroquia. Él iba siendo muy mayor y no quería que, lo que para él era una joya, desapareciera cuando lo hiciera él. Delante de él colgué aquel crucifijo en lo que era mi despacho y se fue tan contento. En un anejo de mi pueblo, de Oropesa, La Corchuela, este anejo, que no tiene vocación de pueblo, está situado en el umbral de un extenso encinar que, por occidente, llega y pasa la frontera con Portugal y por oriente tiende su alfombra verde camino de Talavera de la Reina, hay otro crucifijo en su pequeña iglesia, a la que se la conoce con el nombre de "El Cristo", cuyo Cristo  fue realizado, siglos atrás, con la piel de un rumiante. Su fiesta, muy concurrida y celebrada por gentes que afluyen, a aquel lugar, desde los cuatro puntos cardinales, es por mayo. Es, este Cristo, como el Cristo que realizara el árabe, una pieza única.
Y, mira por dónde, estando hablando con Paco el Molinero estos días de atrás, me entero de que en la ermita de Santa Ana de aquí, de la Real Villa de Caudete, hay otro Crucifijo con la figura de Cristo realizada en el siglo XVIII por un quidam que empleó, para hacerlo, un sencillo papel o cartón.
Como ocurre con el Cristo de La Corchuela, éste de Santa Ana, no se sabe quién lo realizó y, además, tampoco se sabe quiénes lo regalaron a la ermita. Al parecer, quienes lo donaron, manifestaron el deseo de permanecer en el anonimato más absoluto para lo que contaron con la complicidad del santero que recibió la dádiva y que no fue otro que Antonio López Vila, conocido como "El Chocha"'. Muchas veces, la gente curiosa, inquirió al bueno de "El Chocha" que diera a conocer el nombre de los donantes pero, siempre, chocaron con el mutismo de Antonio, el santero.
El paso del tiempo deterioró la obra efímera y hubo que restaurarla, actuación que se llevó a cabo el año 2013 en los talleres de la Universidad Politécnica de Valencia, por Doña Lourdes Cañizares Flores bajo la supervisión de Doña Antonia Zalbieda Muñoz.

Recibe mi saludo, mis

      ¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
20.3.2021 Sábado.  (C. 1.207)

P. Alfonso Herrera Serrano, Carmelita.

7 comentarios:

  1. Muy buenos días P. Alfonso, muy interesante lo que hoy nos ha descubierto de nuestra historia, porque siempre es bueno que alguien como usted y su asesor particular como Paco , vamos conociendo nuestro pueblo y gracias a esa persona anónimo que tuvo a bien su donación. Que tenga un buen día y fin de semana.

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  2. Buenas noches P.Alfonso
    Yo fui una de las personas que le pregunté por el donante a Antonio " el chocha" y no le pude sacar ¡ni mu! ,Antonio era una persona que tenía mucha palabra fue santero de Sta Ana desde primeros 70 del siglo pasado con D Antonio Lopez García de parroco ,hasta principio de los 2000 .Fue un hombre probidencial para Sta Ana lucho con sus pocos medios para restaurar la ermita, arreglar el tejado, pintar,la ermita , cambiar las puertas de entrada, recoger de la parroquia
    y de otras iglesias imágenes de santos y ponerlas en la ermita, poner la luz en casa del santero y darle a la iglesia, conseguir que se dijese misa con el beneplácito y permiso de D Ramón
    Gisbert Conejero(párroco de esos años que lo hizo con
    mucho gusto y alegría ),y muchísimas cosas más ,siempre encontro personas que le ayudamos ha hacerlas (de casi todas estas cosas que hizo soy testigo) llenarían varias crónicas de todo lo que consiguio e hizo .Antonio era una muy buena persona y muy caudetano , estoy seguro que nos mira desde el cielo con su hermano Paco y ruega por nosotros. Gracias Antonio.

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  3. Buenos días,
    Soy Lourdes Cañizares. En 2007 comenzamos con la Asociación Pro-Restauración Ermita de Santa Ana. Fue después de mis estudios en Historia del Arte cuando comencé el Master en Conservación y Restauración de Bienes Culturales. En 2012 ya con los Altares restaurados y el lavado de cara que conseguimos para la preciosa Ermita, encontramos esta escultura literalmente “tirada en el suelo de la sacristía” con un brazo roto y en muy mal estado de conservación. Al principio pensé que no era de gran valor, pedí permiso a la Asociación para poder llevar la escultura a Valencia y así ayudar a mi y a mis compañeros del Master a trabajar con obra real. Mi iniciativa fue todo un éxito, y no solo restauramos esta escultura de Cristo crucificado, si no que con la Colaboración de la Universidad Politécnica conseguimos que se restauraran todas las esculturas de la Ermita.
    Pues bien, este tipo de Cristos Crucificados muy típico en tierras mexicanas, esculturas ligeras realizadas en Papel Mache, cartapesta, caña de maíz, papelón. Sirvió en su momento para la conversación de las personas autóctonas de Latino América. Los colonos españoles trasladaban estas esculturas en barco hacia las nuevas tierras y gracias a su ligereza eran más fácil de transportar y manipular.
    Siguiendo con el asunto, también descubrí, que una vez que habían cumplido su función en estas tierras lejanas, eran de nuevo trasladadas a españa (cada una contaba con su propietario) y era todo un honor para el propietario de las mismas sacarlas en procesión delante de esculturas “tradicionales” en festividades religiosas como en Semana Santa.
    Gracias a esta escultura pude concluir mi Tesis final de Master llamada “Antecedentes Históricos en la evolución de las esculturas de caña de Maíz, cartapesta y Papel Mache. Conservación, restauración y Puesta en Valor del Cristo Crucificado de la Ermita de Santa Ana en Caudete, Albacete”
    Para más información, encantada de poder colaborar.
    Muchas gracias por la puesta en Valor de una escultura poco conocida pero con tanto Valor histórico que pocos ejemplos tan bien conservados encontramos en la Península Ibérica.
    Un saludo. Lourdes

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  4. Buenos días,
    Soy Lourdes Cañizares. En 2007 comenzamos con la Asociación Pro-Restauración Ermita de Santa Ana. Fue después de mis estudios en Historia del Arte cuando comencé el Master en Conservación y Restauración de Bienes Culturales. En 2012 ya con los Altares restaurados y el lavado de cara que conseguimos para la preciosa Ermita, encontramos esta escultura literalmente “tirada en el suelo de la sacristía” con un brazo roto y en muy mal estado de conservación. Al principio pensé que no era de gran valor, pedí permiso a la Asociación para poder llevar la escultura a Valencia y así ayudar a mi y a mis compañeros del Master a trabajar con obra real. Mi iniciativa fue todo un éxito, y no solo restauramos esta escultura de Cristo crucificado, si no que con la Colaboración de la Universidad Politécnica conseguimos que se restauraran todas las esculturas de la Ermita.
    Pues bien, este tipo de Cristos Crucificados muy típico en tierras mexicanas, esculturas ligeras realizadas en Papel Mache, cartapesta, caña de maíz, papelón. Sirvió en su momento para la conversación de las personas autóctonas de Latino América. Los colonos españoles trasladaban estas esculturas en barco hacia las nuevas tierras y gracias a su ligereza eran más fácil de transportar y manipular.
    Siguiendo con el asunto, también descubrí, que una vez que habían cumplido su función en estas tierras lejanas, eran de nuevo trasladadas a españa (cada una contaba con su propietario) y era todo un honor para el propietario de las mismas sacarlas en procesión delante de esculturas “tradicionales” en festividades religiosas como en Semana Santa.
    Gracias a esta escultura pude concluir mi Tesis final de Master llamada “Antecedentes Históricos en la evolución de las esculturas de caña de Maíz, cartapesta y Papel Mache. Conservación, restauración y Puesta en Valor del Cristo Crucificado de la Ermita de Santa Ana en Caudete, Albacete”
    Para más información, encantada de poder colaborar.
    Muchas gracias por la puesta en Valor de una escultura poco conocida pero con tanto Valor histórico que pocos ejemplos tan bien conservados encontramos en la Península Ibérica.
    Un saludo. Lourdes

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  5. Buenos días,
    Soy Lourdes Cañizares. En 2007 comenzamos con la Asociación Pro-Restauración Ermita de Santa Ana. Fue después de mis estudios en Historia del Arte cuando comencé el Master en Conservación y Restauración de Bienes Culturales. En 2012 ya con los Altares restaurados y el lavado de cara que conseguimos para la preciosa Ermita, encontramos esta escultura literalmente “tirada en el suelo de la sacristía” con un brazo roto y en muy mal estado de conservación. Al principio pensé que no era de gran valor, pedí permiso a la Asociación para poder llevar la escultura a Valencia y así ayudar a mi y a mis compañeros del Master a trabajar con obra real. Mi iniciativa fue todo un éxito, y no solo restauramos esta escultura de Cristo crucificado, si no que con la Colaboración de la Universidad Politécnica conseguimos que se restauraran todas las esculturas de la Ermita.
    Pues bien, este tipo de Cristos Crucificados muy típico en tierras mexicanas, esculturas ligeras realizadas en Papel Mache, cartapesta, caña de maíz, papelón. Sirvió en su momento para la conversación de las personas autóctonas de Latino América. Los colonos españoles trasladaban estas esculturas en barco hacia las nuevas tierras y gracias a su ligereza eran más fácil de transportar y manipular.
    Siguiendo con el asunto, también descubrí, que una vez que habían cumplido su función en estas tierras lejanas, eran de nuevo trasladadas a españa (cada una contaba con su propietario) y era todo un honor para el propietario de las mismas sacarlas en procesión delante de esculturas “tradicionales” en festividades religiosas como en Semana Santa.
    Gracias a esta escultura pude concluir mi Tesis final de Master llamada “Antecedentes Históricos en la evolución de las esculturas de caña de Maíz, cartapesta y Papel Mache. Conservación, restauración y Puesta en Valor del Cristo Crucificado de la Ermita de Santa Ana en Caudete, Albacete”
    Para más información, encantada de poder colaborar.
    Muchas gracias por la puesta en Valor de una escultura poco conocida pero con tanto Valor histórico que pocos ejemplos tan bien conservados encontramos en la Península Ibérica.
    Un saludo. Lourdes

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  6. Buenos días,
    Soy Lourdes Cañizares. En 2007 comenzamos con la Asociación Pro-Restauración Ermita de Santa Ana. Fue después de mis estudios en Historia del Arte cuando comencé el Master en Conservación y Restauración de Bienes Culturales. En 2012 ya con los Altares restaurados y el lavado de cara que conseguimos para la preciosa Ermita, encontramos esta escultura literalmente “tirada en el suelo de la sacristía” con un brazo roto y en muy mal estado de conservación. Al principio pensé que no era de gran valor, pedí permiso a la Asociación para poder llevar la escultura a Valencia y así ayudar a mi y a mis compañeros del Master a trabajar con obra real. Mi iniciativa fue todo un éxito, y no solo restauramos esta escultura de Cristo crucificado, si no que con la Colaboración de la Universidad Politécnica conseguimos que se restauraran todas las esculturas de la Ermita.
    Pues bien, este tipo de Cristos Crucificados muy típico en tierras mexicanas, esculturas ligeras realizadas en Papel Mache, cartapesta, caña de maíz, papelón. Sirvió en su momento para la conversación de las personas autóctonas de Latino América. Los colonos españoles trasladaban estas esculturas en barco hacia las nuevas tierras y gracias a su ligereza eran más fácil de transportar y manipular.
    Siguiendo con el asunto, también descubrí, que una vez que habían cumplido su función en estas tierras lejanas, eran de nuevo trasladadas a españa (cada una contaba con su propietario) y era todo un honor para el propietario de las mismas sacarlas en procesión delante de esculturas “tradicionales” en festividades religiosas como en Semana Santa.
    Gracias a esta escultura pude concluir mi Tesis final de Master llamada “Antecedentes Históricos en la evolución de las esculturas de caña de Maíz, cartapesta y Papel Mache. Conservación, restauración y Puesta en Valor del Cristo Crucificado de la Ermita de Santa Ana en Caudete, Albacete”
    Para más información, encantada de poder colaborar.
    Muchas gracias por la puesta en Valor de una escultura poco conocida pero con tanto Valor histórico que pocos ejemplos tan bien conservados encontramos en la Península Ibérica.
    Un saludo. Lourdes

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  7. Buenos días,
    Soy Lourdes Cañizares. En 2007 comenzamos con la Asociación Pro-Restauración Ermita de Santa Ana. Fue después de mis estudios en Historia del Arte cuando comencé el Master en Conservación y Restauración de Bienes Culturales. En 2012 ya con los Altares restaurados y el lavado de cara que conseguimos para la preciosa Ermita, encontramos esta escultura literalmente “tirada en el suelo de la sacristía” con un brazo roto y en muy mal estado de conservación. Al principio pensé que no era de gran valor, pedí permiso a la Asociación para poder llevar la escultura a Valencia y así ayudar a mi y a mis compañeros del Master a trabajar con obra real. Mi iniciativa fue todo un éxito, y no solo restauramos esta escultura de Cristo crucificado, si no que con la Colaboración de la Universidad Politécnica conseguimos que se restauraran todas las esculturas de la Ermita.
    Pues bien, este tipo de Cristos Crucificados muy típico en tierras mexicanas, esculturas ligeras realizadas en Papel Mache, cartapesta, caña de maíz, papelón. Sirvió en su momento para la conversación de las personas autóctonas de Latino América. Los colonos españoles trasladaban estas esculturas en barco hacia las nuevas tierras y gracias a su ligereza eran más fácil de transportar y manipular.
    Siguiendo con el asunto, también descubrí, que una vez que habían cumplido su función en estas tierras lejanas, eran de nuevo trasladadas a españa (cada una contaba con su propietario) y era todo un honor para el propietario de las mismas sacarlas en procesión delante de esculturas “tradicionales” en festividades religiosas como en Semana Santa.
    Gracias a esta escultura pude concluir mi Tesis final de Master llamada “Antecedentes Históricos en la evolución de las esculturas de caña de Maíz, cartapesta y Papel Mache. Conservación, restauración y Puesta en Valor del Cristo Crucificado de la Ermita de Santa Ana en Caudete, Albacete”
    Para más información, encantada de poder colaborar.
    Muchas gracias por la puesta en Valor de una escultura poco conocida pero con tanto Valor histórico que pocos ejemplos tan bien conservados encontramos en la Península Ibérica.
    Un saludo. Lourdes

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