La Sorpresa.

ESTAMPA CAUDETANA.

LA SORPRESA.

Estos días de atrás, en una de sus mañanas, tocó el timbre del convento la santera que cuida y mantiene el Santuario de la Virgen, Nuestra Madre de Gracia y de San Blas como los chorros del oro de puro limpio. Cuando la franquee la entrada la pregunté:

- ¿Lourdes qué te trae por aquí?  - "Quiero hacer una fotografía del gran tapiz que tenéis colgado en la sacristía y que rememora el primer Congreso Eucarístico Diocesano de la diócesis de Albacete y que se llevó a cabo en esta Real Villa de Caudete".

No me dijo nada más y, mientras yo la indicaba el camino para acceder a la sacristía de la Iglesia del convento me dijo:

"no hace falta que me indiques. Esto lo tengo yo más que sabido, lo tengo trillado"

Yo me quedé pensándolo y me dije:

«durante el tiempo en que fui el responsable de este convento no la he visto por aquí nunca. Supongo que, como  tantos y tantos lugareños, tuvo el claustro del convento a su disposición como ámbito donde jugaban los «ñacos» y de encuentro de los mayores. Al parecer, siempre estaban las puertas abiertas de par en par. Eran otros tiempos.

Igual acontecía en mi pueblo. Cuando yo era pequeño, y antes de que mis padres me mandarán interno a un colegio en Arenas de San Pedro, colegio Nuestra Señora del Carmen que era propiedad de un excelentísimo, por su dominio de las matemáticas, don Emiliano Bermejo del que, andando el tiempo, uno de sus nietos, compañero mío de clase, llegaría a escalar muchos peldaños en el campo de la política porque llego a ser, en la primera década de este siglo, con el presidente Zapatero, ministro de Justicia, las puertas de las casas estaban abiertas, sólo se cerraban por la noche, a lo mejor, para prevenir que los lobos, que bajaban de la sierra de Gredos a los estercoleros del pueblo, metieran el hocico y se colaran dentro.

Mientras Lourdes caminaba hacia la sacristía yo seguí ocupándome de las plantas del claustro. Las estaba dando de beber porque, éstas, en invierno, también beben y más en este tiempo en que parece que el sol se ha impuesto y ha encerrado al invierno no sé dónde y nos está regalando un tiempo primaveral y ellas necesitan echar un traguico de cuando en cuando para ir preparándose para cuando llegue definitivamente, que llegará, la primavera.

Y fue, precisamente ayer, cuando tuve LA SORPRESA, a última hora del día, se presentó el Prior del convento y párroco de las dos parroquias de esta Villa, en casa con unos carteles anunciando la celebración del 75 aniversario, las bodas de diamante, de aquel acto de homenaje y adoración al Santísimo Sacramento del altar, Ntro. Señor Jesucristo, bajo la especie  del PAN. En ellos se nos da información desde la Cofradía de la Sacramental, que es a la que pertenece Lourdes, de que el domingo próximo día 27, el que da paso inmediato a los carnavales previos al miércoles de ceniza y que en esta Villa, desde tiempo inmemorial viene celebrándose el ejercicio de adoración al Santísimo que se denomina LAS 40 HORAS en las que, de modo ininterrumpido en los primeros tiempos, no ahora, se venía haciendo por los fieles que se apuntaban para que nunca faltaran adoradores ante el Santísimo. Por los carteles me he enterado de que el Señor Obispo de la Diócesis, don Ángel, presidirá la solemne Eucaristía de las 12 de la mañana en la parroquia de Santa Catalina celebrando así la efemérides conmemorativa de aquel acontecimiento que tuvo lugar en octubre de 1946 como queda de manifiesto en el cartel.

Al parecer, en una reunión tenida por los integrantes de la cofradía de la Sacramental se decidió, no se las razones argumentadas, adelantar la celebración del aniversario desde el mes de octubre al domingo próximo, día 27 de los corrientes.

Como es costumbre, la Cofradía de la Sacramental repartirá por escaparates y lugares idóneos de la villa, este cartel para poner en conocimiento de las gentes del lugar tal acontecimiento.

Recibe mi saludo, mis

      ¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!

24.2.2022. Jueves. (C. 1.462)

P. Alfonso Herrera Serrano. Carmelita.