ESTAMPA CAUDETANA.
LA PLAZA DE LA IGLESIA SE VISTE DE LUCES.
Así como la ves se encontraba ayer a las 19,00 horas, la Plaza de la Iglesia, TODA VESTIDA DE LUCES, cuando llegué a Santa Catalina.
Al grupito de gentes que coincidimos en la puerta de la parroquia nos llamó la atención la luminaria en que se había convertido la plaza aledaña, la de La Iglesia, porque en la programación de los actos a llevar a cabo con motivo de las FIESTAS DE LA NAVIDAD DEL SEÑOR, consta que "el encendido del alumbrado en esta Villa, tendrá lugar el próximo día 15 por la tarde en que las autoridades, acompañadas por la facción juvenil de la Banda Oficial, Asociación Musical Santa Cecilia, procederán al encendido de los motivos luminosos, ya preparados, en plazas y calles para llegar puntuales a la Plaza de la Iglesia donde, al encender el árbol, quedará inaugurado el Mercado de Navidad que allí se instalará"
No se movía nada de aire, ni siquiera una suave brisita que viniera de El Real por la calle del Santísimo Sacramento. Tampoco se movía ninguna de las cientos de bombillas que, en líneas divergentes, partían de la base de la estrella que corona el árbol de luz para encontrar un enganche el los aleros de toda la plaza. Cada uno de los presentes tenía su opinión acerca del encendido. Alguien dió en decir que se debía a que estarían haciendo pruebas para ver si todo estaba dispuesto y funcionando para prevenir cualquier posible fallo de última hora que mande al traste el acto inaugural. Pero, otro de los presentes, hizo notar que no había ningún empleado del Ilmo. Ayuntamiento comprobándolo in situ. Un tercero dijo ¡Vah! A lo mejor no es otra cosa que un fallo y se ha "encendido solo".
No hubo manera de llegar a una conclusión que satisfaciera a todos cuando, desde el interior del templo, empezó a llegarnos el suave eco del rezo del Santo Rosario que fue lo que marcó la disolución del grupito y, mientras algunos entrábamos en la iglesia para unirnos al rezo, otro quedó a la espera de que llegara un familiar para entrar los dos juntos.
Contemplando la Plaza de la Iglesia, toda ella iluminada, dí en imaginar que no era otra cosa que una gran tienda de campaña en la que encontraremos, aquí, en la Real Villa de Caudete, un espacio tranquilo y acogedor, todo iluminado, para hacer un alto en el camino del Adviento por el que vamos con paso decidido al encuentro del Señor que está llegando, que se encuentra, ya, a la vuelta de la esquina.
Recibe mi saludo, mis
¡¡¡BUENOS DÍAS!!!
13.12.2023. Miércoles. (C.1.747)
P. Alfonso Herrera. Carmelita.
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