jueves, 8 de febrero de 2024

La Cica Revoluta.

ESTAMPA CAUDETANA.

LA CICA REVOLUTA.

En la Real Villa de Caudete, que yo sepa, por haberlas visto,  crecen  tres hermosas CICAS REVOLUTAS y, una más, que se vino conmigo desde mi bosquecillo madrileño y a la que planté en el hueco que dejó una pariente lejana a la que se zampó el escarabajo Picudo en el corralón del convento de San José. 

Una crece lozana y guapa, incomprensiblemente, por la poca tierra en la que hunde sus raices, en un tiesto ornamental de hierro en el callejón al que abre la puerta de su cocina el establecimiento de dulces, Picó. Las otras dos, hermosos ejemplares, lo hacen en sendos jardines de otros tantos chalets en la Avenida de la Virgen de Gracia.

Esta planta, según he leído por ahí, es originaria del sur del Japón y ya crecía sobre la faz de la tierra cuando aparecieron los dinosaurios allá en el Mesozoico. Y ha aguantado, y en ello está, gracias a la toxicidad con la que protege sus flores y semillas y que crea problemas muy graves al hígado de los mamíferos que se atreven a saborearlas porque, al parecer, tienen un buen sabor, pero un veneno malísimo, también al ser humano.

La CICA que alegra el callejón que comunica la calle Mercado y El Paseo con la Calle Mayor se encuentra, precisamente ahora, floreciendo.

¡Cuidadico, pues, con ella!

Esta clase de palmeras crece muy despacito, muy lentamente y para que alcance los seis o siete metros, que es su altura normal, tarda entre cincuenta y cien años, dicen los entendidos.

En el proceso de la colonización de los jardines y de los interiores de las casas que ha llevado a cabo, a lo largo de cientos y cientos de años, en aquellas zonas templadas y calurosas, se han ido cultivando y haciéndose presumidicas. De ahí que, cuando llega el invierno, se sometan a una coifeour, a una buena poda. 

Estos días de atrás me ha llamado la atención ver a las CICAS de los jardines de la Avda. de la Virgen de Gracia, con un nuevo look. Han sido afeitadas muy notablemente de modo que , al día de hoy, lucen un esbelto tronco y las han dejado como si fueran unas palmeritas molonas, muy monas. Y, además, tienen que ser fuertes y resistentes porque, a pesar de ser plantas que crecen en climas cálidos, lo hace aquí, en esta Villa que, cuando el invierno dice:"aquí estoy", hace mucho, mucho frío y , todas las CICAS de Caudete, de las que tengo noticia, hasta la que trata de levantarse en el corralón del convento y que se encuentra muy pegadita al suelo, aguantan el tipo y ya no tienen miedo al invierno que año, tras año, viene a pasarse tres meses en esta zona.

Recibe mi saludo, mis


¡¡¡BUENOS DÍAS!!!

8.2.2024. Jueves. (C. 1.799)

P. Alfonso Herrera. Carmelita.

1 comentario:

  1. Habida cuenta de la toxicidad de la planta que con tanto acierto describe el P. Alfonso yo os recomiendo que utilicéis tomate, queso de Burgos 0.0, AOVE, punto de sal y orégano. Bien fácil de hacer. Una ensalada de lujo, y de paso te solidarizas con los agricultores españoles, que tan agitados están en estos momentos. Especialmente los catalanes.

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