domingo, 17 de junio de 2018

Don Antonio


ESTAMPA CAUDETANA.
DON ANTONIO.




Ayer lo publicaba, dándolo a conocer, el periódico de Albacete: CAUDETE. «EL SACERDOTE MÁS ANCIANO DE LA DIÓCESIS CUMPLE 100' AÑOS...»
En el pueblo hay algunos centenarios. Hoy se une a ellos el bueno de D. ANTONIO, el de la Plaza de la Iglesia.
Es, DON ANTONIO, un hombre tocado por la barita mágica pero no de un Hada Buena, ¡qué va!, a DON ANTONIO le ha tocado con su varita un ángel, claro que lo que se dice un ángel, un ángel, no es que sea verdad del todo y digo del todo, porque ya sabemos que los ángeles son emisarios de UNA AUTORIDAD SUPERIOR y ésta, amigo, la ostenta DIOS, ¡ahí es nada! Así que quien le tocó, y bien que lo hizo, fue DIOS POR MEDIO DE SU ESPÍRITU y no le tocó por fuera, como suelen hacer las hadas buenas, también las malas, las indinas, que diría mi padre, sino por dentro, le estrujó bien el CORAZÓN mientras le decía, como solo lo sabe decir Dios: «mira Antonio, porque Dios llama de tú a todo el mundo, TE QUIERO PARA MÍ así que dile a tu santa madre que te prepare el atillo y vente conmigo. Y el bueno de ANTOÑITO se puso en camino dirigiendo sus pasos al seminario de Orihuela-Alicante (por aquel entonces Abacete no gozaba de independencia eclesiástica, vamos, que no había sido erigido como obispado. Más tarde, mediado el siglo pasado, sí que se erigió como diócesis) donde se formó. Concluida su formación seminarística le mandaron a pastorear en distintos pueblos. En mis conversaciones con él no salió a colación pero, con toda posibilidad trabaría comunicación con José Martínez Ruiz (a. Azorín)  cuando tuvo destino en Monóvar, pueblo del famoso escritor.
Pues, sí, hoy nos mira a todos desde lo alto de la columna, emulando a Dionisio el aeropagita, el que se pasó muchos años de su vida subido al capitel de una columna, que forman, uno encima de otro, 100 calendarios. Por muchos lugares del pueblo hay repartidos cartelicos en los que se nos apercibe que todos estamos invitados a unirnos a él en LA ACCIÓN DE GRACIAS POR TAL EFEMÉRIDES QUE TENDRÁ LUGAR EN LA PARROQUIA DE SANTA CATALINA CON LA CELEBRACIÓN DE LA EUCARISTÍA,  A LAS DOCE HORAS, PRESIDIDA POR D. CIRIACO, OBISPO DE LA DIÓCESIS.
Hoy va a ser un día grande en CAUDETE. El motivo, ya lo sabes, DON ANTONIO CUMPLE CIEN AÑITOS y debido a ello recibirá el homenaje del Exmo. Ayuntamiento (lo hace a todos los centenarios) y de todo un pueblo, CAUDETE, del que durante algún tiempo fue CURA PILÓN (aquel que bautizado en una parroquia, luego, con el tiempo, llega a ser su párroco).
Allí por donde pasó, nos dice el Rvdo. Párroco en la «hoja dominical», se le recuerda con cariño.
Él vive en la Plaza de la Iglesia en una casa con prosapia y abolengo que comparte con obras de arte de gentes famosas que vivieron en tiempos pretéritos y así posee un niñico de Alonso cano, que si la pieza en sí ya es muy valiosa porque la firma Alonso Cano, el vestidito con que cubren al Niñito la desnudez realizado en telas nobles repujadas con plata, oro y pedrería no le anda a la zaga me dice DON ANTONIO. También comparte vivienda con un Sanjuanito pintado por Velázquez. Es muy guapa una cruz repujada con el primer cobre traído de Perú. Sí, cuelgan de las paredes de la casa donde vive apaciblemente  el paso de los días, cantidad de obras y diseminados por aquí y por allá objetos de gran valor afectivo y también crematístico, con los que muy bien se podría dotar un museo. ¡No estaría mal la idea!
No es caracol, ni lo apodan con tal nombre, pero cuando hace buen tiempo sale a la puerta de la casa, como hacen los caracoles, para tomar el sol y ver el pueblo pasar delante de él al hacerlo sus gentes. Y es muy frecuente verle muy bien acompañado departiendo en un tono subido porque tiene un tanto oxidados los mecanismos auditivos y las piezas que lo constituyen (martillo, yunque, lenticular y estribo) y que se encargan de introducirle el sonido más allá del pabellón auditivo externo lo que le viene mal para un diálogo ameno y florido, eso de ser duro de oídos, le viene de perillas para encontrarse con Dios en el rezo el Libro de las Horas. Cuando está de esa guisa ni le saludo levantándole la mano porque él está a lo suyo. «A lo suyo, a lo suyo», que diría el P. Ángel, miembro del CONVENTO DE SAN JOSÉ de aquí, de Caudete, y lo suyo, en esas ocasiones, es REZAR A DIOS POR SUS HERMANOS LOS HOMBRES, pues ese es el fin que tiene el rezo del breviario o Libro de las Horas.
Ayer tarde, antes de comenzar la misa en Santa Catalina me acerqué a felicitarle PORQUE MAÑANA ES DOMINGO Y AL SER LA TARDE DE LA VÍSPERA, en sentido bíblico, parte del domingo, me creí con el deber de hacerlo. ¡Y lo hice! Le dije que, en la parroquia de San Francisco, habíamos dado gracias a Dios por su más que alta efemérides en la misa de hacía un rato.

Vive, DON ANTONIO, con su hermana Josefina, la única que le queda, muy bien atendidos por dos señoras. De tarde en tarde aparecen por el pueblo algunos sobrinos y, con motivo de los CIEN AÑOS DEL TÍO, creo que vendrá toda la familia.
Nunca le falta compañía de gentes del pueblo que se acercan para pasar un rato en franca y amena charla aunque haya que gritarle un poquito.

Los salones de La comparsa de Los Mirenos acogerá el homenaje que se le tributará, en magna comida, como requiere el caso, concluida que sea LA EUCARISTÍA DE ACCIÓN DE GRACIAS.

- Sin trastabillarse lo más mínimo, porque es muy pronto para alegrar el momento con un buen orujo al estilo del que suele regalarme mi primo José María, sale raudo, como una flecha, a encontrarse contigo, mi saludo, mis

          ¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
17.6.2018. Domingo. P. Alfonso Herrera, O. C.

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