ESTAMPA CAUDETANA.
LA GUARDIA DE CORPS.
(Florerico pegado al lateral del Sagrario de la iglesia del monasterio de las
MM. CARMELITAS de clausura, donde una preciosa rosa y tres humildes florecicas
de madreselva exhalan su aroma, al tiempo que se inmolan, ante su Creador).
Cada día, siempre, la monja sacristana del monasterio de MM. CARMELITAS de
clausura, se da una vuelta por la huerta y echa una hojeada a rosales y plantas
de flores que crecen aquí y allá salpicando un terreno donde cultivan
ellas, en la medida de sus posibilidades y la ayudada prestada
desinteresadamente por alguien que echa unas horas para mantenerse en forma,
actividad deportiva que les viene muy requetebien a las monjas porque las
hortalizas que se cosechan son de inmejorable calidad. Pues, bien, la monja
sacristana se da ese paseico y de este rosal, de aquel lirio de verano, de esta
cala, de esa petunia, de la madreselva trepadora, va sacando la flor o
flores más lindas para Él, para Jesús Sacramentado, para que le sirvan de
GUARDIA DE CORPS.
Ayer, al llegar al monasterio para celebrar con ellas y con los fieles que
bajan hasta la iglesia del monasterio a las 08,00 horas, para hacerles compañía
en la celebración de la Eucaristía, me llamaron la atención esa preciosa rosa
de colores inigualables que anda esforzándose por abrirse en su totalidad para
ofrendarse, así misma, al Señor que nos espera en el sagrario y tres sencillas
flores de madreselva que la acompañan y que, con ser tan sencillas y humildes,
dejan escapar, de su ser íntimo, una fragancia que da verdadero placer aspirarla.
No sé si la monja sacristana habrá tenido experiencias místicas en las que se
le haya hecho presente el Señor, como sí las tuvo su hermana en el Carmelo,
Teresa de Jesús, la monja carmelita abulense que se pasó media vida de aquí
para allá, por los caminos polvorientos de la geografía patria, para poner en
marcha una quincena de conventos de monjas que habrían de vivir de acuerdo con
la REGLA original del Caramelo sin ninguna de las mitigaciones que se fueron
aceptando con el paso del tiempo. Y, aún así, tenía tiempo para dedicar un rato
al Amigo del alma, a Jesús de Teresa (en una de esas experiencias, el Señor le
preguntó a la monja carmelita de Ávila:
- "¿Cómo te llamas?"
Ella le contestó:
- "Me llamo Teresa de Jesús"
Y el Señor le contestó:
- " Pues Yo me llamo Jesús de Teresa").
Pero si el Señor le ha concedido a la monja sacristana esas gracias, de las que
yo no tengo noticia alguna, soy del parecer que no faltaría en la charla el
reconocimiento y gratitud del Señor por esos detallicos diarios con que, con
tanto afecto y cariño, le agasaja cada mañana.
Recibe mi saludo, mis
¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
16.9.2020. Miércoles. (C. 1021)
P. Alfonso Herrera Serrano, Carmelita.
Muy buenos días, P. Alfonso, las MM.Carmelitas ( las encerrado) son muy cuidadosas para tener el Sagrario y el resto del Altar para que esté todo en perfecto estado, para poder tener esos momentos de adoración y recogimiento con Jesús Sacramento y su Madre la VIRGEN del CARMEN.Que tenga un buen día.
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