lunes, 2 de noviembre de 2020

Marcando el Camino

ESTAMPA CAUDETANA.

MARCANDO EL CAMINO


Ayer por la mañana, cuando el sol ya estaba en todo lo alto luciendo galones, mandando, la luna ya había hecho mutis por el foro, a toda prisa, para esconderse en el cuarto oscuro, recibí por WhatsApp la fotografía que ilustra estas palabras.  Me la mandaba Ana María. Seguramente que, al bajar la persiana de su cuarto para irse a cenar, descubrió la maravilla de una luna entera, llena, nuevecita, luminosa, abriéndose paso por entre los árboles que  circundan el patio de recreo del colegio Amor de Dios, sito en la Avenida de la Virgen de Gracia, Madre y Patrona de la Real Villa de Caudete.
Es una imagen preciosa, es una imagen sugestiva, es una imagen que dice más que lo que alumbra con su luz, en plena noche, porque tras un tiempo de medrar, de crecer y crecer, ha llegado a la plenitud para la que fue creada: "y puso Dios dos lumbreras en el cielo, la mayor para que alumbrara el día, el sol, y, otra, más pequeña, la luna, para que lo hiciera durante la noche" (Gn. 1,16). Yo creo que es una imagen preciosa de aquello que celebraba ayer el orbe católico. El ser humano que, a lo largo de la vida va, como la luna, medrando, creciendo y creciendo, hasta que, tras la oscuridad a que ha estado sometido por la tiranía de la materia, de la contingencia, se levanta luminoso en la realidad para la que fue creado.

Nunca más oportuna que ayer, día de TODOS LOS SANTOS, la fotografía de la luna levantándose desde la oscuridad. Es una linda alegoría de lo que le acontece  al  ser humano que, tras su paso por la tierra, a este lado de la vida, se levanta, luminoso, en el día sin fin de la inmortalidad, cave Dios.

Contrasta, con esa alegoría, la actitud del Gremio de Campaneros de Santa Catalina que, al llegar  LA SOLEMNIDAD DE TODOS LOS SANTOS, a la mitad del día de la FIESTA, comenzaron a sacarle a Catalina (la campana más grande de la torre de la Parroquia de Santa Catalina), toques lánguidos, toques de  lamentos, toque de difuntos porque, al día siguiente, hoy, iba a ser el DÍA DE TODOS ELLOS.
No, no esperaron los componentes del Gremio de Campaneros de Santa Catalina al amanecer del día dedicado a recordar y a orar por los lugareños, que se nos ausentaron de la Villa,  por la Avenida de la Ciudad del Silencio, hasta allí, hasta el cementerio y, de paso, también hacerlo por todos los difuntos que vivieron en este mundo y ya marcharon al de Dios.

Ravindranach Tagore dicen que definió la muerte como "un despertar a un nuevo amanecer".  Y, yo, estoy de acuerdo con el indú si lo completamos con que, en ese amanecer, el sol que pone la LUZ, ES DIOS.

Recibe mi saludo, mis

      ¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
2.11.2020. Lunes.  (C.1 069)

 P. Alfonso Herrera Serrano, Carmelita.

 

2 comentarios:

  1. Fina Solera Rodriguez2 de noviembre de 2020, 0:18

    Buenos días P. Alfonso . Guapa estaba la luna la víspera del día de todos los Santos y hoy día de los Fieles difuntos nos disponemos a recordar a nuestros seres queridos que ya no están con nosotros . Aunque todos los días los añoramos. Buen día para todos .������

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  2. Muy buenos días, P. Alfonso, bonitas fotos las que ayer recibió para poder saludarnos y disfrutar de ese momento de la naturaleza , siempre hay personas que saben conseguir una buena instantáneas.Que tenga un buen día de los Difuntos.����

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