ESTAMPA CAUDETANA.
CAUDETE SE MUEVE.
Cuando un labrador dice que sus árboles están moviendo nos está haciendo saber
que los viejos troncos de sus árbol Ayer domingo, cuando me acerque a la parroquia de San Francisco para reunirme
con la feligresía y compartir con ellos la Eucaristía dominical festiva,
observé, en la avenida de San Jaime, entre la farmacia del barrio y la avenida
de Valencia a una máquina de esas que favorecen el trabajo en las obras de
restauración o construcción . Se encontraba aparcada justo, justo, delante de
un claro en la calle desde la avenida de San Jaime hasta la calle Colón. Todo
estaba diáfano. Todo aquello que había constituido, durante más de un siglo,
una de tantas casas que mandara construir el prócer de la Real Villa de
Caudete, conde de San Carlos, don Paco Albalat Navajas.
Sí, LA REAL VILLA DE CAUDETE, es un ser vivo, se mueve. Un ser qué permanezca
inmóvil, inerte, es un ser llamado a la descomposición y a la destrucción, a su
desaparición. Mientras que un ser que se mueve, un ser en restauración, un ser
poniéndose al día, está indicando su dinamismo, no su inane permanencia
esperando su desaparición.
En ello pensé cuando, ante mí, apareció aquella máquina delante de lo que,
otrora, fuera una casa donde hervía la vida y que, durante mucho tiempo, ha
permanecido arrumbada, triste y sola, como "aquel arpa que dormía, lleno
de polvo, en el rincón de una habitación oscura" de la que nos daba
noticia, en su rima, Gustavo Adolfo Béker.
Una casa desescombrada y una gran máquina delante de lo que ha venido a ser un
lugar diáfano son signos de que el Barrio y, por ende, la Villa, no están
muertos, porque una casa venida a menos por el paso de más de una centuria de
años comienza a revivir desde sus cimientos. La puesta en marcha de su
renovación, va a hacer surgir construcción algo nuevo. Eso es lo que va a
ocurrir en el Barrio de San Francisco, en su Avenida de San Jaime.
Estos días de atrás la máquina hundió tejados y paredes y, con ello, hizo
desaparecer aquel plano que, en otro tiempo levantarán los albañiles, a las
órdenes del constructor Arellano, para dar cobijo por poco dinero, o por nada,
a aquellos necesitados de vivienda de hace más de un siglo.
Con el advenimiento de la pandemia del Covid -19 se ha dado un fenómeno que se
ha dejado notar, de modo en el Barrio de San Francisco, según me hacía
saber una comunicante:
"Mira, me decía, debido al encerramiento a que fue sometida la población
(ahora sabemos que inconstitucionalmente por sentencia firme del Tribunal
Constitucional) y más concretamente los matrimonios jóvenes con niños durante
el que han tenido que permanecer, intramuros de su propio piso, con los niñicos
bajo una sensación de una sensación de claustrofobia muy grande, ha
habido matrimonios jóvenes que han pujado para hacerse con las casas
deshabitadas, desde hace bastantes años, por disponer de un amplio patio
pensando, precisamente, en la salud física y psíquica de sus hijicos porque ya
no se verán constreñidos por un enclaustramiento exigido por cualquier
imposición externa devengada, no importa por qué causa. Y, así, puedan
jugar y pasarlo bien sus niñitos.
Tres matrimonios jóvenes, me decía, han comprado esta casa, aquella otra y otra
más.
Una de estas casas, a la que se refería mi comunicante, es la que nos
ocupa, es la que han echado abajo las máquinas de deconstrucción de edificios,
para convertir el terreno liberado en una nueva y flamante vivienda adaptada a
los tiempos que corren.
La opción que han tomado estos matrimonios jóvenes me ha parecido estupenda
porque, además de disfrutar de una nueva manera de vivir en familia, lleva
consigo la renovación de un viejo barrio, cómo es el Barrio de San Francisco
que si, en otro tiempo fue estupendo y puso cobijo a mucha gente de la
villa, al día de hoy se ha venido quedando un tanto obsoleto en algunas de sus
construcciones.
Recibe mi saludo, mis
¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
19.7.2021. Lunes. (C. 1.304)
P. Alfonso Herrera Serrano. Carmelita.
Muy buenos días, P. Alfonso, sí, es bueno ver construcción en Caudete y como usted bien dice hay que ir renovando y lo que se va quedando obsoleto dejarlo guapo por el bien del pueblo y esas familias para que sus niño tengan un buen espacio para sus juegos, y también es buen señal para el trabajo. Que tenga un buen día.
ResponderEliminar