martes, 16 de octubre de 2018

Santa Teresa de Jesús


ESTAMPA CONVENTUAL.
SANTA TERESA DE JESÚS.
Ayer celebraba la Iglesia y los carmelitas de modo especial, la fiesta de Santa Teresa de Jesús, monja carmelita declarada por el papa San Pablo VI  primera mujer DOCTORA UNIVERSAL DE LA IGLESIA el día 27 de septiembre de 1970.
A la ceremonia asistieron entre otros obispos, el cardenal Enrique y Tarancón y la delegación española estuvo presidida por los entonces príncipes de España Juan Carlos y Sofía.
Si entras en la iglesia del CONVENTO DE SAN JOSÉ por la puerta de la izquierda te das de manos con el gran fresco de SANTA TERESA que pintara, en la década de los cincuenta del siglo pasado, el pintor valenciano Remigio Soler, me relata el P. Ángel, a la sazón, novicio en este CONVENTO.
El 4 de octubre de 1582 se levantaba Santa Teresa con todo el vigor que le daba el Espíritu Santo, al encuentro del Padre Dios. Lo hacía desde una sencilla celdica de su convento en Alba de Tormes. Se llevó para el cielo un ramo de flores de un almendro que se vistió totalmente de flores en el momento de su óbito, hecho que sorprendió y sobrecogió a los testigos del acontecimiento. Había nacido en Gotarrendura, un pueblecito cercano a Ávila, el 24 de marzo de 1515.
Antes de su muerte ya tenía montada y puesta en marcha una nueva familia del Carmelo, los Teresianos o Carmelitas Descalzos. 15 fueron los conventos de monjas que dejó en marcha y con la colaboración se San Juan de la Cruz alguno de frailes. Pero sin desgajarlos del tronco viejo del Carmelo puesto que contaban con el permiso del P. General de la Orden, el P. RUBEO. Ella murió en el seno de la Orden. La separación se llevó a efecto más de medio siglo después de su muerte promovida por el que fuera administrador de Felipe II, llamado Doria, en un Capítulo de la nueva Institución que, según mi parecer, fue dando pasos, al estilo de los que van dando, en la actualidad, ciertos individuos catalanes separatistas.
Cuando se inauguró un convento de Monjas Carmelitas Teresianas en el pueblo cántabro de Sierrapando, yo estuve presente como prior de nuestro convento carmelita de la Antigua Observancia de Viérnoles. Presidía la celebración Eucarística con la que se inauguraba el nuevo monasterio, el Abad del monasterio trapense de Cóbreces y el orador sagrado, un fraile carmelita descalzo, dijo en su homilía que la santa Madre, Santa Teresa, deseó siempre fundar un convento junto al mar y, en este momento, podemos decir, era 1981/2, que se cumplía el deseo de la Santa (Sierrapando, al lado de Torrelavega, se encuentra a menos de 20 kms. del mar).

Muy carmelitano viaja hasta ti mi saludo, mis

          ¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
16.10.2018. Martes. P. Alfonso Herrera, O. C.

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