La Parásita

ESTAMPA CAUDETANA.
LA PARÁSITA

Ayer te hablaba de la HIGUERICA que había venido a nacer en un huequecito, entre piedras, en la escalera que da acceso a la parroquia de Santa Catalina.
Hoy me bajo hasta la parroquia de San Francisco, en el barrio de la Real Villa de Caudete al que da nombre el Santo de Asís. Y me bajo hasta allí para darte noticia de otra HIGUERICA.
Este tiempo de atrás, el Sr. Concejal, Don Joaquín Pagán, aprovechando la limpieza y cuidado de la foresta de la Villa, incluyó en la actividad unas palmeras añosas que crecen en el jardincico de la Parroquia del Barrio. La poda y limpieza de las seis palmeras que crecen desde un mismo tronco dejó al descubierto a una HIGUERICA  que crece, PARÁSITA, en el tronco, entre las palmas de una de ellas (la ves en las fotos que aparecen al inicio de este escrito).
Con toda seguridad nació en ese lugar la HIGUERICA porque uno de los tejaínos (gorriatos) de los muchísimos que venían usando la palmera como dormitorio hasta que, libre de tanta palma seca, les privó de seguridad y tuvieron que emigrar a otros árboles de las inmediaciones, habría dejado la simiente que su mollejica no hizo papilla y la dejó caer con su deposición. O, en su caso, llegaría hasta allí traída, en volandas, por alguno de  los vientos que entran en la Villa por el camino de La Encina.
A mí, personálmente, me ha llamado agradablemente la atención. Porque la HIGUERICA crece sin complejos en la añosa palmera de la que extrae sus nutrientes y, la PALMERA no la hace ascos, no la ahoga. La ha prohijado, como si fuera una palmerica más de las que surgen, también, en el tronco viejo de la misma PALMERA.
Muchos son los ejemplos que contemplamos en la naturaleza en la que unas especies comparten su vida con otras con las que nada tienen que ver, ni relación genética alguna que justifique esa relación, salvo aquella inicial, según el decir de los que aceptan la teoría evolucionista, de la que surgen todas las especies que, en el mundo han existido y existen en la actualidad.
En el jardincico de la Parroquia de San Francisco, la parroquia que engloba el Barrio al que da nombre, se da un ejemplo lindo de PARASITISMO en el que una HIGUERICA está creciendo en una PALMERA en la que encuentra su sustento.
Espero que la voz de aquella persona que, en su momento, aquel en que los oficiales de parques y jardines del Ilmo. Ayuntamiento aligeraron de las palmas secas de años, que caían indolentemente a lo largo de su tronco,  ocultando la esbeltez, no deshaga la íntima relación de una PALMERA con una HIGUERICA que crece, PARÁSITA, muy agustico, en su tronco. Espero que la persona, a todas luces, contraria a permitir tal asociación, no lleve a cabo lo que voceaba y la HIGUERICA, todavía liliputiense, pueda seguir creciendo en perfecta sintonía, para mi gusto, y placer de aquellos que, como yo, la hayan descubierto y gozado con el regalo que nos hace la Naturaleza en el jardincico de la Parroquia de San Francisco de la Real Villa de Caudete.

Recibe mi saludo, mis

      ¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
4.8.2020. Martes. (C. 978)

P. Alfonso Herrera Serrano, Carmelita.