ESTAMPA CAUDETANA.
LOS EQUINOS DE PASEO POR LA VILLA
No es frecuente encontrarse paseando por las calles de la
Real Villa de Caudete a tres hermosos alazanes, de gran alzada, llevando sobre sus
lomos a un jinete y a sendas amazonas.
Tuvo lugar el hecho el domingo pasado al filo del
mediodía. Me encontré con ellos, en la calle Eras, cuando volvía de
reunirme con los feligreses en la parroquia de San Francisco para celebrar la
Sagrada Eucaristía.
Iban al paso. No iban a competir por las calles de la Villa,
como lo hacen en la ciudad italiana de Siena, a ver quién ganaba la copa que se
otorga al vencedor en un hipotético concurso. Nada de eso, yo diría que iban
disfrutando mientras tomaban notas a lo largo del trayecto pues, es sabido, que
los equinos tienen un memorión notable y así lo reconoce la sabiduría popular
cuando asevera: "que no tropiezan dos veces en la misma
piedra".
Paseaban, no tenían prisas, prueba de ello es que me dieron
tiempo a aparcar el coche en un hueco existente para ese menester y obtener la
fotografía de la que me sirvo, en el día de hoy, para trasladarte mi saludo.
Estos días de atrás me enteré, por los medios de
comunicación social de la
Villa, que andaban solicitando los criadores de ganado
caballar los permisos pertinentes para poner en práctica su proyecto. Creo que
el Consistorio de la Villa habrá dispuesto ya la normativa adecuada para que,
en el predio de la misma, pueda llevarse a cabo la solicitud presentada por los
amantes de estos nobles animales.
De cualquier manera, a mí, me gustó ver a estos singulares,
guapos y nobles animales andando tranquilamente, como si estuvieran de visita
turística, por las calles del municipio y obtuve esta instantánea para que a
galope tendido, trotando o a paso ligero o, simplemente, paseando, se acerque
hasta ti y te lleve mi saludo, mis
¡¡¡¡¡¡BUENOS DÍAS!!!!!!
16.11.2022. Miércoles. (C.1.608)
P. Alfonso Herrera. Carmelita.
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