Cercos Siliquastrum

ESTAMPA CAUDETANA.

CERCOS SILIQUASTRUM.

Hace unos días me mandó un sobrino mío, que vive en Motril, me mandó la estampa de un precioso ÁRBOL DEL AMOR al que los entendidos en la botánica llaman CERCOS SILIQUASTRUM, vaya nombre.

Presumía mi sobrino de un ejemplar singular de esta clase de árboles que crece allí por donde él desarrolla su vida, su quehacer, su compromiso, su trabajo, como dándome envidia o, en su caso, para presumir ante mí del objeto de su placer, de su contemplación, de la alegría que produce en él cada mañana, al salir de casa y encontrarse con tal espécimen arbóreo.

Y, la verdad sea dicha, razón no le falta, pues, a la vista está  el elemento del que presume y se vanagloria.

 Y es que a ese no le han metido el serrucho como lo han hecho con éste que te presento hoy como estampa de la Real Villa de Caudete al que, sin miramiento alguno, sí le han metido el serrucho, a base de bien, aligerándole del follaje que otrora competía con el que me ha obsequiado mi pariente andaluz.

EL ÁRBOL DEL AMOR  crece en muchos lugares de esta villa caudetana, pero el que ves al inicio de estas letras, lo hace en un alcorque practicado en la calle Dos de Mayo donde está, al día de hoy, siendo vestido como es debido, por el bien hacer de una primavera en jarras, para ponerle guapo y favorecer al transeúnte con la visión placentera de sus flores tan bonitas y, de paso, dejar, allí, por donde pasa el viandante una sombra gratificante.

No, sobrino, no me das envidia. Eso sí, reconozco que me llevas la delantera en el disfrute placentero de una obra monumental que la naturaleza ha puesto, para tu gozo, allí por donde pasas al salir de tu casa.

Recibe mi saludo,mis

¡¡¡BUENOS DÍAS!!!

27.4.2024. Sábado. (C.1.877)

P. Alfonso Herrera. Carmelita.