Nerium Oleander

ESTAMPA CAUDETANA.

NERIUM OLEANDER.

Han sido las primeras flores de la NERIUM OLEANDER con las que me he topado en mi deambular por la Real Villa de Caudete.

Ocurrió ayer por la tarde cuando me acercaba a la parroquia de Santa Catalina para cumplir con una encomienda pastoral. 

Corría por la avenida de la Libertad un vientecillo que las movía entre los barrotes de una valla de separación entre una propiedad y la avenida, justo a la altura de mi cara. Por eso no me pasaron desapercibidas. Y, claro, no desaproveché la ocasión de colgarlas en la pared oscura de mi teléfono para servirme de ellas hoy y hacerlas portadoras de mi saludo para ti.

Ahí, donde las metí, no hacen daño alguno porque solo me traje la imagen y no la flor, ni las hojas, ni las ramas de esa planta que suele emplearse para adorno en jardines como las que crecen vigorosamente en el parterre del paseo Luis Golf, allí donde éste mira a la piscina municipal climatizada y en nuestro corralón contamos con una planta muy frondosa. Y te digo que no me hizo daño porque sé que es muy venenosa y, yo, lo único que hice fue sacarla una fotografía.  Pero, aprovechando que estamos en el mes de mayo, te voy a contar un hecho del que tuve noticia al leer algo de lo acontecido dos siglos y pico atrás. Resulta que, en el día 2 de este mes del año 1808, en España, más concretamente en Móstoles y Madrid, se llevó a cabo el levantamiento contra las tropas napoleónicas que andaban pisoteando nuestro suelo patrio, y te cuento que, una docena de aquellos aguerridos soldados gabachos, un buen día, para satisfacer su hambre, tuvieron la mala ocurrencia de pinchar unos buenos tasajos de carne de cerdo en ramas de NERIUM OLEANDER, que encontraron a mano, para asarlos al fuego. Y, cuentan las crónicas que ocho de los doce militares franceses "palmaron", murieron y los otros cuatro quedaron para el arrastre, casi, casi, como los toros después de haber sido lidiados. 

Durísimo fue el aviso que recibieron los soldados franceses. Claro que, "no hay mal que para bien, no venga", que afirma el refrán castellano, y, desde entonces, no utilizaron las atractivas ramas de las NERIUM OLEANDER para tales menesteres.

Esa es la razón por la que los animales racionales y los no racionales la miran con prevención y respeto y la tratan con usía para no verse en la misma situación que se vieron aquellos pobres francesicos.

Pero su veneno no es óvice para que algunos de sus componentes químicos se empleen en farmacopea para tratar ciertas enfermedades de tipo cardíaco y canceroso.

Esta planta es originaria de toda la cuenca mediterránea y de más allá, hasta de Vietnam y de China pero ha ido colonizando casi todo el mundo, principalmente, en aquellos lugares donde el calor aprieta. Se emplea, como antes te dije, como planta ornamental en jardines y parterres y también como separación de calzadas en las autopistas españolas y también en las americanas, que yo sepa. Recibe tantos nombres como se la da en los lugares donde crece. Aquí, en España, la  llamamos ADELFA, BALADRE,  TRINITARIA, entre otros muchos.

Como te he dicho anteriormente, las flores que presiden mis letricas de hoy son las primeras que veo de ADELFA en esta primavera y que, por estar siendo movidas por un airecillo que iba de un lado a otro en la avenida de la Libertad, me llamaron la atención y me dije:

"¡qué bien! estas florecillas serán las que, mañana, (por hoy), lleven mi saludo, mis 

¡¡¡BUENOS DÍAS!!!"

8.5.2024. Miércoles.(C.1.888)

P. Alfonso Herrera. Carmelita.