Así de guapa estaba ayer tarde la Luna.

ESTAMPA CAUDETANA. 

ASÍ DE GUAPA ESTABA AYER TARDE LA LUNA. 

Todavía no era noche cuando dejé en los cubos de reciclaje que el ilustrísimo Ayuntamiento tiene situados en el inicio de la calle del Alcalde Luis Pascual, unos envases de plástico y una botella y, sin embargo, allí estaba ella, LA LUNA, columpiándose entre los cables que transportan la energía que, a la postre, le harán la competencia cuando la noche haga lucir, sus galones. 

Me daba la sensación de que le estaba haciendo una pedorreta al sol porque, éste, que había estado alumbrando, no voy a decir calentando porque hizo mucho frío, el día de ayer, estaba dejando detrás de sí su crepúsculo, todo él luminoso, con su luz suave. Y, en medio de él, se encontraba la luna, toda envidiosa del astro Sol que se iba a descansar para luego surgir, todo lozano, en el hemisferio sur.

Así la vi ayer por la tarde desde el inicio de la calle Madre Elisa Oliver(*).  Y, uno, que ya va juntando bastantes calendarios, recordó aquellos tiempos de su infancia, juventud y madurez en que reinaban en España los duros, las pesetas y las monedas de céntimos de peseta y, claro, al contemplar a la luna de aquella guisa vino a mi memoria aquella moneda grande de 10 céntimos, a La Perra Gorda. 

Así vi yo ayer a la Luna como a la Perra Gorda  de feliz recuerdo, que tuvo vigencia antes de que  irrumpiera, con fuerza el euro y sus fracciones, en España, para favorecer las relaciones económicas y comerciales, aunándose, con los países  que conforman la Unión Europea.

Recibe mi saludo, mis

¡¡!BUENOS DÍAS!!!

14.1.2025. Martes. (C. 2.118).

P. Alfonso Herrera. Carmelita.

(*) Madre Elisa Oliver fue una joven muchacha que junto de otras seis recibió la llamada del Espíritu Santo para dedicarse en cuerpo y alma a sus hermanos más necesitados principalmente a los niños y a los mayores en tiempos difíciles cuáles fueron los finales de el siglo XIX y principios del XX en esta Real Villa de Caudete. Crecieron bajo los auspicios de los Padres Carmelitas que habitaban el convento de San José (El Carmen) por entonces y, más concretamente, bajo los auspicios y cuidados del Prior de entonces, el padre Cirilo Font. De aquel plantel de jóvenes mujeres generosas surgió una institución religiosa LAS HERMANAS DE LA VIRGEN MARÍA DEL MONTE CARMELO, que echó a andar en esta Real Villa de Caudete al concluir su noviciado. Siendo ella, la Madre Elisa, tenida como fundadora y primera Madre General y que a día de hoy están presentes en los cinco continentes.